sábado, 27 de septiembre de 2014

Jaqueando la universidad

Esta semana hablaba con un compañero/jefe. La verdad es que tengo tantos compañeros/jefe como compañeros/no jefes. O casi. En cualquier caso, él me hablaba de su hija y de la carrera que piensa hacer el año próximo. Tras comentar las diferentes opciones, surgió la motivación, la típica que todo padre tendría con su hijo: evitar que cometiera algunos errores que él, y yo también, habíamos cometido en nuestra entrada en el mundo laboral.

A raíz del comentario, recordé un artículo que había leído hacía ya bastante tiempo. Tal como yo lo recordaba, era un artículo que, de alguna formar, habría aparecido en la tertulia cibernética que por aquel entonces (cuando tenía más tiempo libre) frecuentaba. El artículo habría sido escrito en inglés por alguien no famoso pero publicado en las páginas de algún medio, este sí famoso. The Times, por ejemplo. Por último, el título sería algo así como "Hacking the University/School". El fondo del artículo sería uno de marcado materialismo muy propio de las universidades estadounidenses.

Le comenté que buscaría el artículo y se lo enviaría. Dicho sea de paso, tengo la costumbre de buscar las cosas que digo que voy a buscar. Lo hago salvo que se me olvide, claro está. Esta no fue la ocasión, pero esta ocasión sí que tiene relación con la memoria y sus curiosidades, otro tema que no es nuevo en el blog. Pues bien, como decía, busqué el artículo con escasa fortuna. Algunos títulos y medios parecían propicios pero los extractos que Google mostraba cuando no directamente su contenido, se empeñaban en sacarme de un error al que yo era ajeno.

Así pues, decidí ir a la fuente, al correo. Allí busqué el nombre de una de las personas que recordaba involucrada en la discusión así como alguna de las palabras que pudiera contener aquella discusión. De repente apareció un artículo que había recibido de un antiguo compañero de trabajo, artículo en español y con la temática adecuada. El artículo es el siguiente: https://desencadenado.com/2010/12/hackeando-la-educacion-universitaria.htm

Tras leerlo, tuve que rendirme a la evidencia. Mi memoria (como la de todos nosotros), me engaña. Se inventa (como la de todos nosotros) unas historias que podrían resumirse en una presentación de 5 ó 6 diapositivas unidas por el invisible hilo del relato. Es decir, nada que ver con la realidad.

Podría añadir además que tomé nota para hablar de esto en el blog, creé una entrada y escribí "Jaqueando" con un marcado propósito. Imagino que hacer alguna broma con burros y caballos. De todo aquello lo que queda es solo el título, eso que Google recuerda mejor que yo, y otra presentación de un par de diapositivas unidas por otro hilo invisible que se difuminan rápidamente. Mañana, lo que quedará de aquel pensamiento será solo lo escrito desde este teclado porque tanto las diapositivas como el hilo habrán desaparecido como si fueran humus de pensamiento ... humus, el del campo como el de mi casa cuando lo como con zanahorias.

Un saludo, Domingo.

sábado, 13 de septiembre de 2014

Cosas que cambian

En la vida, todo cambia, todo ha cambiado. Desde hace 50 años, además, rápidamente. ¿Qué ha cambiado últimamente en mi vida aunque sea ligeramente?. Pues veremos, en el ordenador que tengo en casa de mis padres, el sistema operativo, un Fedora 19 por Fedora 20. Eso ha ocurrido hoy con la aplicación fedup ... gracioso nombre :-). Ha tardado mucho pero aparentemente todo sigue funcionando igual. Incluyendo el arranque tan lento que se quedó desde que borré algo que no debía o simplemente desde que se calienta ... ups, algo que no se ha actualizado correctamente, el sensor de temperatura.

Lo segundo es el teléfono móvil. Ahora tengo uno chino con sistema operativo MIUI, de la compañía china Xiaomi dirigida por un español y que tiene una legión de fanáticos seguidores. Debo decir que hasta ahora estoy muy contento con el móvil, leo las cosas en grande, la batería me basta con cargarla un par de veces a la semana con un uso superior al que tenía antes ... y a un precio magnífico.

Lo  tercero es el trabajo que no es que haya cambiado es que las vacaciones casi se me han acabado. Habrá que ir trabajando poco a poco para conseguir más el año próximo ... o a final de este.

¿Más cosas?. Posiblemente. Pero eso será cuestión de otro día. Ahora mismo me gustaría centrarme en algo que lleva un cierto tiempo llamándome la atención. De hecho lleva mucho tiempo, y es precisamente eso, el tiempo. Pero esta vez no se trata de si el tiempo pasa más o menos deprisa sino de qué pasaba hace millones de años y qué hacían los de mi misma especie hace tan solo unos cuantos cientos de años; pongamos mil. Quedándonos en particular con estos últimos, los pocos que sabían escribir no tenían blog para guardar ahí las tonterías que se les fueran ocurriendo. Aparte, el papel debía ser como la gasolina hoy en día, carísimo :-).

Pero independientemente de eso, me imagino a un hombre, aunque bien pudiera ser una mujer, de clase media alta. Pongamos que un "autónomo" con suerte al que su negocio le fuera medianamente bien.

Aclaración: hago referencia a ese tipo de clase porque alguien de clase inferior bastante tenía con vivir como para encima poder ponerse a pensar: primum vivere, deinde filosofare.

Pues bien, alguien así y con mi edad posiblemente empezaría a ser una excepción habida cuenta de la esperanza de vida de la época. Y precisamente por eso, quizás se preguntaría qué pasaría cuando él muriera. Y la respuesta posiblemente sería: nada. ¿Qué iba a pasar?. Los señores seguirían siendo señores, los siervos siervos y aquí paz (cuando la hubiere) y después gloria (el que hubiera sido bueno).

Hoy en día, solo una decena de cientos de años después, unas pocas décimas de segundos en el reloj de la Tierra (recomiendo ver el vídeo de youtube) sabemos que el tiempo está desbocado. Que igual sacamos un nuevo dispositivo electrónico que cortamos cabezas y aterrorizamos como hacíamos no hace tantos años. Sobre todo sabemos, algo que nuestro imaginario hombre no podía.

Así pues, no es descartable que si hombre y yo, supiéramos que mañana no estaremos aquí, tuviéramos algunas espinitas clavadas. Algunas, las mismas: no haber tenido hijos, no haber podido hacer según qué cosas que planeábamos o deseábamos, saber cómo les irá a nuestros familiares .... pero posiblemente habría otras; al menos una que nos diferenciaría: la curiosidad por saber qué pasará mañana, por ejemplo.

Un saludo, Domingo.

sábado, 6 de septiembre de 2014

Depresión post-vacacional

Recuerdo cuando veía la televisión, llegaba septiembre y con él las noticias sobre la vuelta al cole y su coste para una familia media. Junto a ellas, de forma casi inevitable, las noticias sobre la depresión post-vacacional. El caso es que ahora me pregunto si esas noticias de depresión post-vacacional no habrán sido malentendidas. En particular se me ocurre que la gente puede estar deprimida durante todo el año, se olvida de ello durante las vacaciones y, al volver, la realidad le golpea como un martillo conservado en manteca.

Estoy leyendo la Wikipedia para informarme al respecto y me encuentro con elementos altamente positivos. El primero es que afecta principalmente a personas de menos de 45 años. No sabemos si es porque los hábitos de los mayores son más reposados o porque el síndrome afecta más a los padres de niños pequeños o por qué. Esperemos que sea solo por la edad ya que, de ser así, ya estoy más cerca de burlar el síndrome.

Otro de los comentarios es que aconsejan no desconectar del todo durante las vacaciones. De ser así, lo que he hecho durante las mías, conectarme una vez a la semana o un par de veces para revisar los cientos de correos recibidos y clasificar los 10 ó 20 que realmente requerirán seguimiento a la vuelta, podría ser una buena práctica. Aunque quizás sea porque la entrada de la Wikipedia la ha escrito algún jefe de gran empresa ;-).

Un saludo, Domingo.