sábado, 27 de diciembre de 2014

Electrizante final de año

La verdad es que el final de este año que se acaba en unos días está siendo un visto y no visto. Desde septiembre hasta ahora, desde que murió mi abuela casi podría decir, muchas cosas han pasado en muchos aspectos de mi vida y creo que pocas he contado aquí. Por ese motivo, aquí va un pequeño resumen que podría incluso valer como resumen del año.

Septiembre, octubre y noviembre fueron los meses de la compra de casa, compra de casa que se firmó ya empezado diciembre. Desde entonces días de limpieza y arreglos de una casa con potencia ... y mucho trabajo por delante.

Y entre medias, un despertar futbolístico de esos que pasan muy de vez en cuando solo que esta vez fue especial. Esta vez debí marcar como diez goles en un partido de diferente factura. Y al partido siguiente más o menos por el estilo. Y entonces se fue la magia, tal como pasaba en la película de Robin Williams. De vez en cuando se produce algún chispazo como el de hoy, último partido del año que he empezado con un zapatazo a la mismísima escuadra que me hizo ilusionarme con otro de esos días de inspiración de cara al gol pero que finalmente no resultó ser sino el recuerdo de lo que fue y posiblemente nunca ya más sea; mi particular canto del cisne.

De hecho, si tengo resumir estos cuatro últimos meses posiblemente lo haría como una racha de suerte sin parangón; simplemente eso. Esa racha de suerte ha podido incluir cosas como una casa con capacidad para albergar más perros que personas, una bonita colección de goles y por último un "torneo de suerte". Ese torneo de suerte no es ni más ni menos que una competición en el trabajo para ver quién ganaba más fichas en un casino. Y resulté ser yo. Aunque eso merece una entrada aparte. Una entrada que escribiré después y publicaré antes así que tampoco voy a extenderme mucho más.Y por el momento me despediré con unos versillos de final de año tal como he estado haciendo durante los últimos ... los que sea.

Tresciento sesenta y cinco días
En que la vida pasa con y sin daño,
En algunos se te va la alegría,
En otros la alegría te la lía,
Y en el último, la esperanza: un nuevo año.


Feliz Año, Domingo.

El rey del casino

Fue justo al día siguiente; justo al día siguiente del cumpleaños del niño de la familia, la niña de los amigos y la antigua compañera de trabajo. Esta vez había aprendido la lección y no iba hecho un fantoche. En esta empresa el sentido del ridículo lo llevan mal. Por no ver ni se ve a alguien diciendo que se ha equivocado aunque lo haya hecho. Quizás son costumbres de empresa, no lo sé. El caso es que llevaba el atuendo adecuado y el coche ... prestado por el museo


Esta vez presentía que habría un concurso y que el concurso tendría que ver la ruleta. Por las razones equivocadas pero al final acerté. Empezó el concurso, todos recibimos 20 fichas de casino y éramos libres de gastarlas bien jugando al Black Jack (del cual recordaba las reglas de las explicaciones recibidas el año anterior) o bien jugando a la ruleta.

Comencé jugando al black jack y comencé con suerte. Tras unos diez minutos jugados llevaba ya unas 30 fichas ... y el convencimiento de que aquello no era mucho más divertido que el póker, que me parece aburridísimo. Así pues, decidí que iríamos con la táctica de siempre, todo o nada, all-in en el lenguaje del sector, a la ruleta. En realidad no fue un todo o nada, fue una mezcla, muy afortunada mezcla de todos o nadas y jugadas de tanteo. En las jugadas de tanteo mi suerte fue dispar pero en las de todo o nada gané siempre. Eso hizo que, tras varias apuestas, tuviera en mi poder algo más de 300 fichas. Creo que debí ser el primero en llegar a esa cantidad.

Entonces la cosa cambió. Mi interés por marcharme se vio refrenado por la posibilidad de ganar el primer premio, premio que otras veces había sido bastante goloso. Lo primero que decidí es que pararía de jugar y que iría viendo pasar los ataúdes de mis competidores ahogados en su propia avaricia. Eso hice durante casi una hora. En ese tiempo vi a varias personas superar mi número de fichas y a casi todas cegarse al ver que otros lo habían conseguido y perderlo todo. No sabía cuántas personas estaban siguiendo mi estrategia pero sí calculaba que no muchas.

Mientras tanto alguna apuesta menor perdida incluyendo las fichas de algún compañero que quería que fuera yo el que se las jugase. No era su noche, solo la mía.

A falta de unos 15 minutos, de 12 tiradas de ruleta más o menos, habida cuenta de que varias personas me superaban, decidí hacer un último par de apuestas que decidirían si tenía opciones de victoria o no. La primera salió cruz; la segunda, la que importaba, cara. Tenía en mis manos 560 fichas. Paré de jugar de nuevo.

Mientras estudiaba a los posibles rivales, reducidos solamente a dos o tres. Uno era un amigo al que la suerte y una estrategia razonable le había hecho (sin saberlo) superarme anteriormente y, con la suerte de su parte, estaba en condiciones de hacerlo de nuevo. Para ello tenía que seguir jugando, que era lo que hacía porque pensaba que había otra persona con una gran cantidad de fichas de la que se tenía que distanciar. Otra era una chica que aparentaba tener un gran número de fichas de diferente cuantía, lo que dificultaba saber exactamente cómo de peligrosa era.

Dos últimas tiradas, mi amigo se arriesgó y ganó. Hice un recuento mental y yo seguía todavía en cabeza pero por muy poco. La chica seguía ganando cantidades más pequeñas.

Última tirada, pregunté educadamente a mi amigo si se iba a arriesgar y me dijo que no, di las gracias internamente. No recuerdo si la chica apostó o no ni el resultado.

Empezó el recuento: de forma un tanto traviesa, enseño mis fichas (hasta el momento ocultas) a mi amigo. Afortunadamente para él en este tipo de eventos suelen dar tres premios. El croupier cuenta primero sus fichas, 530. Realmente muy bien para haber empezado por 20 y haber realizado un gran número de apuestas.

A continuación voy yo, 560 fichas conseguidas con más suerte que apuestas.

Ningún candidato oculto a excepción de la chica que vuelca sobre la mesa lo que atesoraba en su bolso. A ojo, la cosa iba a estar justa. Muchas fichas de diversa valía pero ... muchas fichas. Mi amigo seguro de que no superaría las 530, yo no tan seguro. Acaba el conteo y son 539. Ya había pódium.

Me llamó la atención que la competición acabara como las vueltas ciclistas. Tras miles de kilómetros, horas sobre el sillín, y solamente unos segundos separan a los tres primeros. En este caso, tras diversas apuestas con fichas de 100, solamente 30 fichas entre primero y tercero.

A continuación llaman a los ganadores. En mi caso se produjo una cierta decepción al ver los regalos pero sobre todo por los rumores que habían corrido al respecto. En cualquier caso el regalo es solo la excusa, ganar un concurso aunque solo sea por suerte siempre es gratificante. No solo eso, también quería pensar que no fue solo la suerte y que mi estrategia había ayudado.

Recogí mi premio y me fui de allí con dos lecciones aprendidas. La primera es que espero jamás volver a pisar un casino. Toda la suerte que necesitaba tener la tuve aquella noche. La segunda es que si te mantean tus compañeros de equipo una primera vez, si tus pies consiguen tocar el suelo, puedes intentar (y conseguir) salir andando y evitar un segundo manteo. En cualquier caso, no estuvo mal. Ganar arriesgando dinero de mentira nunca lo está.

Un saludo, Domingo.

sábado, 6 de diciembre de 2014

Tratar los síntomas

Creo que fue esta semana cuando alguien, alguien probablemente del trabajo, habló de un cierto problema que nos azota últimamente o de algún otro que lo hace de forma relativamente frecuente. No estoy seguro de si además antes había pensado en ello la semana anterior debido a un motivo similar. Es posible. En cualquier caso, lo realmente importante es que alguien comentaba que no había que tratar los síntomas sino tratar las causas.

Esto es cierto. En general, pero es cierto. Si en un bosque en llamas apagas solo las llamas pero dejas los rescoldos, es solo cuestión de tiempo y mala suerte en forma de viento que surja otro incendio. De igual forma, si ante la fiebre solo das antipiréticos pero no antibióticos que ayuden a curar la infección, quizás estemos cometiendo un error que tapará la tierra de igual forma que la salsa tapa los errores del cocinero.

Sin embargo, hay enfermedades cuyo único tratamiento conocido es el de sus síntomas. No soy médico ni mi formación médica es excelsa así que, aunque los casos que conozco están siempre relacionados con los virus, es posible que este sea el caso de más patologías. Así de memoria recuerdo que el tratamiento sintomático es el adecuado para la gripe, el ébola y la parvovirosis en los perros. Todas son potencialmente letales pero la gripe en mucho menor grado que los otros dos así que me centraré en estas últimas. Además ambas creo que causaban un sangrado interno que eventualmente cursaba en choque hipovolémico usualmente letal. El tratamiento en ambos casos intenta ayudar al cuerpo a remontar por sus propios medios.

A diferencia del primero, estos virus se cogen potencialmente solo una vez, lo que es entendible aunque solo sea por mera evolución. Es decir, estas enfermedades no son frecuentes durante la vida de una persona, a diferencia, por ejemplo, de la gripe aunque a esta también le tratamos los síntomas.

Pero este podría ser el criterio, o uno de ellos, a seguir acerca de cuándo ir a erradicar la causa raíz o cuándo simplemente tratar los síntomas. Volviendo a un entorno como pueda ser el del trabajo, cuando se produce algo y luego se reproduce y vuelve a suceder, entonces evidentemente hay que intentar arrancar el mal de raíz. Sin embargo, si algo se produce de forma excepcional, quizás sea suficiente con tratar los síntomas. No es que sea algo terriblemente preocupante pero sí posiblemente algo para pensar. Al menos a mí me lo parece.

Un saludo, Domingo.

sábado, 29 de noviembre de 2014

Tergiverso: Impuestos

Esta semana hablaba con un compañero noruego sobre impuestos. En la compraventa de casas ellos pagan un 2,5% y le parecía mucho hasta que vino aquí. No recuerdo exactamente si se refería al impuesto de transmisión patrimonial que actualmente está en el 8%, creo, o si se refería a la plusvalía que tributa al tipo del ahorro, más del 20%.

En esa misma conversación yo argüía que en un hipotético o no tan hipotético cambio de casa, el tener que vender "barato" para comprar otra cosa igualmente barata. Eso lo hablaba también hace unos meses con una compañera de mi mujer y su marido que se cambiaron de casa el año pasado. La mejor situación, económicamente hablando, se produce cuando tu casa, comprada por 10, se vende por 1 pero te permite comprar por 3 una que antes hubiera costado 30.

En cambio, los impuestos, son otra cosa. Entre impuestos, notaría, gestoría y similares, te gastas un 10% que no hay forma de recuperar en la segunda compra. Es más, en la segunda compra tendrás que abonar otro 10% adicional. En esa circunstancia te viene a la cabeza lo del "impuesto revolucionario" y puedes o no decirlo pero si lo haces te arrepientes pronto porque no son precisamente las mismas circunstancias por las que pasaron las personas que lo sufrieron. Se trata simplemente de impuestos, es decir, nos los imponen y no podemos negarnos. Llegamos incluso a oxímorons como esos recargos temporales de la solidaridad tan propios de la política. Se trata simplemente de impuestos.

Impuesto: Impuesto, eso que tenemos tan bien puesto y que con retroactivo efecto se nos lleva hasta el afecto.Un afecto que se dispara cuando Montoro y los de antes dicen que quieren mofarse y lo hacen en tu cara.

Impuesto: Impuesto, para el político parece voluntario pues políticos a diario los esquivan sin defecto.
Defecto que nunca encuentran y si lo hacen lo hacen tarde pues la cosa está que arde y en la cárcel nunca entran.

Impuesto: Impuesto, para el ciudadano suena a condena pues te atan con cadenas si un día fallas en esto. Y si falla la justicia, ciudadano, a las fallas cuando no para Siberia que este billete de Iberia para ti te está esperando. Y si falla la justicia, político, tú eres otra cosa pues vemos a diario que la pena de telediario es más que menos cosa hermosa.

Impuesto: Impuesto para carreteras, sanidad y educación, aquí cambia la canción pues no debe ser tan malo esto. Y es cierto que ella cambia pues no nos cansan los impuestos, lo que cansan son los casos de política injusta, de justicia politizada y su incesto.

Un saludo, Domingo.

El once del once

No, esta vez no es sobre fútbol. Esta vez es más bien sobre la Once y aquel anuncio de hace unos años en los que el 11 del 11 repartían algo así como un premio de 10 millones y 10 premios de un millón. El caso es que a principios de mes recordé el anuncio gracias a otra asociación de números. Este mes me tocaba donar sangre, la donación 121, número que a los aficionados a las matemáticas desde pequeños se les graba por no ser sino 11 veces 11.

Por este motivo pensé que sería bonito ir a donar el 11 del 11 y que fuera la vez número 11 que donaba 11 veces. Sin embargo, los recortes hace tiempo que dejaron, en mi caso, como única opción donar el primer lunes de cada mes, los sábados que llueve y no juego al fúbol o en el pueblo una vez cada 3 meses. La tercera no se daba este mes, menos todavía el día 11; la primera, obviamente porque un día 11 no puede ser el primer lunes de un mes, tampoco. Pensé que sería bonito, pero no pudo ser. La segunda tampoco se dio ... cuando debía.

Hará algo más de una semana me di cuenta de que ya había pasado el 11 del 11 y que no había escrito en el blog lo que quiera que se me ocurriera a inicios de mes que estuviera relacionado con el 11 del 11. Unos días después fui a donar. Llegué tarde y doné sangre en vez de plasma tal como tenía previsto. Sin embargo, tampoco pasa nada puesto que venía de una racha de donaciones de plasma. Además, parece que estamos en unos momentos en los que la sangre es más necesaria. Así pues, mi donación 121, 17 años después de la primera, fue de sangre.

Un saludo, Domingo.

sábado, 22 de noviembre de 2014

Tergiverso: Somos historia

Vuelvo a uno de mis temas recurrentes: el tiempo. Esta semana he sido consciente, por decir de alguna forma, hechos que en un futuro serán considerados historia. Historia general o historia particular. Posibles cambios en la vida de aquellos que los protagonizan. En algunos casos puedo ser yo, en otros un compañero de trabajo e incluso en alguno más alguien que es o era ampliamente conocido en España. Intentaremos contarlo con el "perverso" estilo de García Barbeito ... solo que a mi manera, que en nada puede compararse a la suya.

Esta tranquila semana, escasa de deportes futboleros, ni al mus yo ya juego, ni merengue ni azulgrana.
Ni merengue ni azulgrana, ni azulgrana ni merengue, ni el moderno ébola ni el olvidado dengue, yo a mirar por la ventana.
Ventana que separa, el invierno del aire acondicionado, dos equipos nuevos, modernos, pero siempre el mismo pringado. Pero el pringado está dentro, a este lado de la ventana, que durante toda la semana, nada de fútbol ha jugado.
No ha jugado por sus rodillas aquejadas del merengue, ese que a la cintura es dengue, merengue de rosco y rosquillas.
No ha jugado ni su rodilla ni su panza mientras metía en su memoria que las grandezas de España iban ya camino Soria entre bromas y entre chanzas.
Entre chanzas y entre bromas, iban ya camino Soria una directa a la carcoma y la otra a que hablaran de ella en la Noria.
En la Noria, si es que acaso sigue en parrilla pues yo de ahí ni la morcilla ya recuerdo en mi memoria.
Sí recuerdo a Cayetana y la cantora Isabel que al Alba y por la mañana, lloradas, llorosas se ven. Y se ven entre chanzas y bromas y se ven entre bromas y chanzas, esas mismas alabanzas que nosotros no hemos de ver.
Ni lo veremos, ni yo lo quiero, ni quiero que lo quieran ver, pues yo lo único que quiero, que quiero que quieran ver, es que no lo es todo el dinero y casi casi ni el deber pues las deudas y el dinero juntas van y suman cero y si eso no lo ves, es lo único que quiero.
Y mañana en tu memoria, no seré yo lo primero, estaré camino Soria con mi deber, con mi dinero y, al menos eso espero, una bonita historia.

Un saludo, Domingo.

sábado, 15 de noviembre de 2014

Entrada y media al día

Ayer, leyendo el blog de La Ciencia de la Mula Francis, leí que este hombre había publicado una media de 1,5 entradas al día. Yo no sé cuántas entradas he publicado pero sé que hace años eran casi dos por semana, luego pasé a una por semana y ahora casi estoy llegando a las dos al mes. Si no llego es precisamente por entradas como esta que simbolizan por un lado que no tengo tiempo para publicar más (o tengo otras prioridades en mi vida) y que cada vez me siento más fascinado por una ciencia que (no sé si por mi edad, por las cosas que voy olvidando o un poco por todo) cada vez me fascina más. En concreto el tiempo, que siempre me atrayó, ahora lo hace sobremanera. Hoy, de vuelta del fútbol, veía al lado de la autovía un monte lleno de piedras y pensaba en cómo ese monte había debido estar casi inalterado durante miles de años e incluso hoy en día casi lo está, a pesar de estar al lado de una ciudad.

Un saludo, Domingo.

sábado, 1 de noviembre de 2014

A Manoly

La semana pasada hubo un reencuentro al más puro estilo película americana donde los alumnos del instituto se reencuentran 30 años después en el mismo lugar donde tres décadas antes, durante la fiesta de graduación, tomaban el mismo ponche ... pero sin alcohol.

Este reencuentro en realidad, más que 30 años después se produjo 3 años después. Hace tres años escribía yo sobre la sesquidécada que hacía que no había visto a ciertas personas y comentaba lo siguiente:
http://donmingo-2011.blogspot.com.es/2011/10/15-anos-despues.html y poco después esto otro: http://donmingo-2011.blogspot.com.es/2011/10/15-anos-despues-ii.html

Sin embargo, no son comparables. Aquel del 2011 fue una "macro-quedada" con todos los antiguos alumnos del colegio y el número de promociones abarcadas era sensiblemente alto. Esta vez todo fue más íntimo: solo la clase de la Señorita Manoly. Esta vez, además, asistieron casi todos los "niños". La "Delegada" con mayúsculas consiguió reunirnos en un "parque de bolas" que fue testigo de más de 20 personas muchas de ellas con sus parejas y los niños que daban sentido al lugar.

Un domingo casi como otro cualquiera, compartiendo alguna que otra agradable charla con antiguos amigos y con frases, algunas, bienintencionadas pero con escaso recorrido, el mismo que auguraba yo a aquellas reuniones semestrales que proponían hace 3 años. Bien estará la cosa si podemos repetirlo dentro de tres años y sobre todo si la gran protagonista puede volver a asistir.

Entre los grandes recuerdos de esta reunión se encuentran todo lo que trabajaba esta mujer y todo lo que colaboraban nuestros padres. Aprendimos a tocar la flauta quitándonos a nosotros mismos 15 minutos del recreo y lo hacíamos con gran alegría. Hablaba con los padres de los que mejor leíamos para que, un día a la semana, nos quedáramos una hora más a "mejorar" nuestro nivel de lectura pero eso no era más que el cebo para que, los que no leían tan bien, tomaran como un premio y no un castigo el quedarse ellos y que, de hecho, fueran ellos los que voluntariamente pidieran unirse a nosotros para finalmente sustituirnos. Años después coincidí jugando al fútbol con un "gitanillo" más joven que yo que la había "padecido" y me contaba cómo aquella "bruja" les hacía quedarse para mejorar.

Nos llevó también gran parte de los trabajos que conservaba de nuestra promoción, la Promoción Privilegiada pues era así como rotulaba uno de los archivadores donde había ido guardando las cosas que en las sucesivas limpiezas había ido encontrando. Cada uno se quedó con lo que pudo encontrar suyo en lo que yo aprecié como un anticipo de despedida. Tiene 75 años y el aspecto de durar muchos más pero imagino que es sumamente consciente de los efectos del tiempo. No sé si uno de ellos fue que esta vez no me riñó cuando la llamé de usted. Algo que no recordaba pero que he podido recordar gracias al blog. En este sentido me ha gustado comprobar que sigo igual, manteniendo ese respeto por alguien que creo que da sentido al rótulo de ese archivador pues si algún privilegio tuvo esa generación fue el de poder contar con una maestra y unos padres así.

Es cierto que nosotros también pusimos de nuestra parte y como aparecía también rotulado en el archivador, ¡Cuántos universitarios! pero eso de poco hubiera servido de haber nacido en otro tiempo, otro lugar u otras circunstancias. Por ese motivo, acabo de cambiar el título de la entrada sustituyendo "30 años después" por el que tiene ahora mismo. A Manoly ... ¡Muchas gracias!

Un saludo, Domingo.

sábado, 18 de octubre de 2014

Solo de niños, de un niño

La semana pasada esto iba de niños y perros. Esta solo de niños. De un niño en particular: Alex.

Alex era el hijo de mi antiguo jefe. Alex era ese niño por el que brindé y compartí una cerveza con su padre, la única media cerveza que me haya tomado nunca, cuando nos comunicó que los médicos lo habían declarado oficialmente "Libre de Cáncer". Ojalá hubiera podido compartir otra por la segunda vez.

Pronto quedaré con los antiguos compañeros del colegio. Ellos, en un grupo de whatsapp comparten las fotos de sus hijos. Todos sanos, todos llenos de vida y esperemos que sigan así durante muchos, muchos años. Se me ocurren pocos castigos más crueles para unos padres que ese tormento por el que han pasado los padres de Alex viendo apagarse la luz que les guiaba hasta convertirse en la más brillante estrella del firmamento tal como comentan en http://www.gofundme.com/alexanderfundorg

Alex quería ir a Disneyland y no pudo. En vez de eso se fue al cielo. Se llevó con él un trozo muy grande de los corazones de sus padres que ahora tendrán que aprender a vivir sin él tras llevar varios años viviendo por él. Y se llevó uno chiquitito, muy chiquitito de mí, que ni siquiera lo conocía en persona.

Alex, descansa en paz. Niños de todos mis amigos y conocidos, por favor, cuidaos.

Un saludo, Domingo.

sábado, 11 de octubre de 2014

De niños y perros

Esta ha sido la semana del ébola, su información y desinformación. Esta ha sido también la semana en la que se ha criticado más que discutido que el gobierno trajera el ébola a casa. Esta ha sido también la semana en la que las asociaciones para la defensa de los animales han demostrado que tienen un corazón tan grande como las comodidades del mundo en que vivimos. Se acaba la semana y solo puedo alegrarme de que la enfermera enferma haya superado las horas más bajas en las que algún que otro periódico hablaba ya de cremaciones sin autopsia y esté más cerca su curación.

Según tengo entendido, el ébola es una enfermedad con un 90% de mortalidad ... en África con las comunicaciones de África, los hospitales de África, los médicos, enfermeras y misioneros europeos que allí van a arriesgar su vida por salvar la de otros y sin el dinero europeo porque el ébola solo nos ha preocupado cuando lo hemos visto aquí. Es una pena que repatriaran a los dos religiosos porque, de haber muerto en África, todavía podríamos seguir pensando que el problema es africano.

Son muchos los frentes y me disperso. Intentaré evitarlo. Volvamos con lo del 90% de mortalidad. No sé cuánto sería la tasa de mortalidad en Europa con nuestros cuidados tantos antes (durante años y años de bien comer y dormir) como después de contraer la enfermedad. No sabemos cuál será la tasa de mortalidad por franja de edad. Seguro que los ancianos tendrían una tasa de mortalidad superior, como pasa con cualquier otra enfermedad. Seguro que una persona joven y sana como esta enfermera tendrá muchas posibilidades de supervivencia o al menos muchas más que un anciano. Por este motivo, espero y deseo que sobreviva. Estoy convencido que así será.

No entraré a valorar los errores que han volado por doquier, no creo que ello aporte nada. Mejor paso a valorar que España como país haya donado 1 millón de euros para ayudar a esos países que sufren la plaga del ébola. No haber donado más ha podido causar que ahora tengamos estos lodos. Pero no quisiera culpar a mi gobierno (aunque yo no lo haya votado). Prefiero analizarme a mí. Llevo varios meses viendo carteles en las paradas de autobuses pidiendo mi ayuda. Llevo varios meses negándola. Otras veces no lo he hecho pues donar parte del dinero que, afortunadamente, te sobra es muy conveniente para calmar una conciencia atribulada. Otras veces quizás ha habido un terremoto que, como el de Tahití, se ha llevado por delante la vida de cientos de miles de personas. La epidemia del ébola se ha llevado por delante la vida de "solo" unos pocos miles de personas en el lapso de muchos meses. No es, a casi todas luces, algo tan urgente como lo otro. Claro, luego pasa lo que pasa.

Yo coincido con muchos al decir que la mejor opción era dejar a los religiosos morir en África. Con su edad y su enfermedad lo raro es que llegaran vivos aquí. Su curación hubiera sido tan excepcional como excepcional ha sido el descuido de la enfermera. Excepcional debo calificarlo a juzgar por todos los compañeros españoles que hay en África realizando la misma actividad con peores medios que no han sido infectados.

Sin embargo, en lo que no coincido es en que esa fuera la opción que hubiera que tomar. No me hubiera gustado que la tomaran en caso de que se hubiera tratado de un familiar mío, sobre todo sabiendo que el contagio es algo realmente excepcional. Esa empatía que otros pueden confundir (o no) con debilidad creo que es lo que nos diferencia de otros grupos de personas sobre los que nos creemos superiores.

Así pues, comprendiendo que el virus llegara a España por avión (aunque dicen que por aire no se transmite), que alguien tuviera un descuido que esperemos que sea solo mortal para un animal, ¿qué opino sobre la eutanasia del mismo?. Pues opino que debía haberse puesto en cuarentena al igual que se ha hecho con el resto de sospechosos de estar infectados. Opino que debía haberse analizado su sangre en búsqueda del dichoso virus durante el periodo de cuarentena. Opino que quizás podría haber estado encerrado con su amo si su amo asumía el riesgo con el fin de evitar el estrés al perro. Opino que su sacrificio era más que evitable y que al igual que me hubiera gustado que trajeran a mi familiar enfermo de ébola para intentar salvarlo, me gustaría que cualquiera de mis perros hubieran pasado la cuarentena en un caso así.

Y opino, claro está, que puedo opinar esto porque soy muy afortunado porque puedo filosofar mientras que en África apenas pueden vivir. Porque, en un momento dado, me entristece más el sacrificio de un perro y la convalecencia de alguien que habla español a 500 kilómetros de mi casa que los cientos de personas, muchos de ellos niños, que han muerto de ébola esta misma semana en África.

Un dicho famoso aludía a que una sociedad es así como trata a sus niños. Yo añadiría que la forma de tratar a los animales también define a la sociedad. Creo que esta semana realmente nos retrata. Habrá quien no lea esto y piense algo parecido de su sociedad española. Habrá quien no lea esto y piense algo parecido de su sociedad cosmopolita. Ambos podrían tener razón pero ambos podrían estar equivocados. El hecho de pensar como yo no les hace estar más cerca de la realidad. Lo que les hace es pensar que deberíamos pensar más en los niños, los perros, los ancianos y las enfermeras.

Un saludo, Domingo.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Jaqueando la universidad

Esta semana hablaba con un compañero/jefe. La verdad es que tengo tantos compañeros/jefe como compañeros/no jefes. O casi. En cualquier caso, él me hablaba de su hija y de la carrera que piensa hacer el año próximo. Tras comentar las diferentes opciones, surgió la motivación, la típica que todo padre tendría con su hijo: evitar que cometiera algunos errores que él, y yo también, habíamos cometido en nuestra entrada en el mundo laboral.

A raíz del comentario, recordé un artículo que había leído hacía ya bastante tiempo. Tal como yo lo recordaba, era un artículo que, de alguna formar, habría aparecido en la tertulia cibernética que por aquel entonces (cuando tenía más tiempo libre) frecuentaba. El artículo habría sido escrito en inglés por alguien no famoso pero publicado en las páginas de algún medio, este sí famoso. The Times, por ejemplo. Por último, el título sería algo así como "Hacking the University/School". El fondo del artículo sería uno de marcado materialismo muy propio de las universidades estadounidenses.

Le comenté que buscaría el artículo y se lo enviaría. Dicho sea de paso, tengo la costumbre de buscar las cosas que digo que voy a buscar. Lo hago salvo que se me olvide, claro está. Esta no fue la ocasión, pero esta ocasión sí que tiene relación con la memoria y sus curiosidades, otro tema que no es nuevo en el blog. Pues bien, como decía, busqué el artículo con escasa fortuna. Algunos títulos y medios parecían propicios pero los extractos que Google mostraba cuando no directamente su contenido, se empeñaban en sacarme de un error al que yo era ajeno.

Así pues, decidí ir a la fuente, al correo. Allí busqué el nombre de una de las personas que recordaba involucrada en la discusión así como alguna de las palabras que pudiera contener aquella discusión. De repente apareció un artículo que había recibido de un antiguo compañero de trabajo, artículo en español y con la temática adecuada. El artículo es el siguiente: https://desencadenado.com/2010/12/hackeando-la-educacion-universitaria.htm

Tras leerlo, tuve que rendirme a la evidencia. Mi memoria (como la de todos nosotros), me engaña. Se inventa (como la de todos nosotros) unas historias que podrían resumirse en una presentación de 5 ó 6 diapositivas unidas por el invisible hilo del relato. Es decir, nada que ver con la realidad.

Podría añadir además que tomé nota para hablar de esto en el blog, creé una entrada y escribí "Jaqueando" con un marcado propósito. Imagino que hacer alguna broma con burros y caballos. De todo aquello lo que queda es solo el título, eso que Google recuerda mejor que yo, y otra presentación de un par de diapositivas unidas por otro hilo invisible que se difuminan rápidamente. Mañana, lo que quedará de aquel pensamiento será solo lo escrito desde este teclado porque tanto las diapositivas como el hilo habrán desaparecido como si fueran humus de pensamiento ... humus, el del campo como el de mi casa cuando lo como con zanahorias.

Un saludo, Domingo.

sábado, 13 de septiembre de 2014

Cosas que cambian

En la vida, todo cambia, todo ha cambiado. Desde hace 50 años, además, rápidamente. ¿Qué ha cambiado últimamente en mi vida aunque sea ligeramente?. Pues veremos, en el ordenador que tengo en casa de mis padres, el sistema operativo, un Fedora 19 por Fedora 20. Eso ha ocurrido hoy con la aplicación fedup ... gracioso nombre :-). Ha tardado mucho pero aparentemente todo sigue funcionando igual. Incluyendo el arranque tan lento que se quedó desde que borré algo que no debía o simplemente desde que se calienta ... ups, algo que no se ha actualizado correctamente, el sensor de temperatura.

Lo segundo es el teléfono móvil. Ahora tengo uno chino con sistema operativo MIUI, de la compañía china Xiaomi dirigida por un español y que tiene una legión de fanáticos seguidores. Debo decir que hasta ahora estoy muy contento con el móvil, leo las cosas en grande, la batería me basta con cargarla un par de veces a la semana con un uso superior al que tenía antes ... y a un precio magnífico.

Lo  tercero es el trabajo que no es que haya cambiado es que las vacaciones casi se me han acabado. Habrá que ir trabajando poco a poco para conseguir más el año próximo ... o a final de este.

¿Más cosas?. Posiblemente. Pero eso será cuestión de otro día. Ahora mismo me gustaría centrarme en algo que lleva un cierto tiempo llamándome la atención. De hecho lleva mucho tiempo, y es precisamente eso, el tiempo. Pero esta vez no se trata de si el tiempo pasa más o menos deprisa sino de qué pasaba hace millones de años y qué hacían los de mi misma especie hace tan solo unos cuantos cientos de años; pongamos mil. Quedándonos en particular con estos últimos, los pocos que sabían escribir no tenían blog para guardar ahí las tonterías que se les fueran ocurriendo. Aparte, el papel debía ser como la gasolina hoy en día, carísimo :-).

Pero independientemente de eso, me imagino a un hombre, aunque bien pudiera ser una mujer, de clase media alta. Pongamos que un "autónomo" con suerte al que su negocio le fuera medianamente bien.

Aclaración: hago referencia a ese tipo de clase porque alguien de clase inferior bastante tenía con vivir como para encima poder ponerse a pensar: primum vivere, deinde filosofare.

Pues bien, alguien así y con mi edad posiblemente empezaría a ser una excepción habida cuenta de la esperanza de vida de la época. Y precisamente por eso, quizás se preguntaría qué pasaría cuando él muriera. Y la respuesta posiblemente sería: nada. ¿Qué iba a pasar?. Los señores seguirían siendo señores, los siervos siervos y aquí paz (cuando la hubiere) y después gloria (el que hubiera sido bueno).

Hoy en día, solo una decena de cientos de años después, unas pocas décimas de segundos en el reloj de la Tierra (recomiendo ver el vídeo de youtube) sabemos que el tiempo está desbocado. Que igual sacamos un nuevo dispositivo electrónico que cortamos cabezas y aterrorizamos como hacíamos no hace tantos años. Sobre todo sabemos, algo que nuestro imaginario hombre no podía.

Así pues, no es descartable que si hombre y yo, supiéramos que mañana no estaremos aquí, tuviéramos algunas espinitas clavadas. Algunas, las mismas: no haber tenido hijos, no haber podido hacer según qué cosas que planeábamos o deseábamos, saber cómo les irá a nuestros familiares .... pero posiblemente habría otras; al menos una que nos diferenciaría: la curiosidad por saber qué pasará mañana, por ejemplo.

Un saludo, Domingo.

sábado, 6 de septiembre de 2014

Depresión post-vacacional

Recuerdo cuando veía la televisión, llegaba septiembre y con él las noticias sobre la vuelta al cole y su coste para una familia media. Junto a ellas, de forma casi inevitable, las noticias sobre la depresión post-vacacional. El caso es que ahora me pregunto si esas noticias de depresión post-vacacional no habrán sido malentendidas. En particular se me ocurre que la gente puede estar deprimida durante todo el año, se olvida de ello durante las vacaciones y, al volver, la realidad le golpea como un martillo conservado en manteca.

Estoy leyendo la Wikipedia para informarme al respecto y me encuentro con elementos altamente positivos. El primero es que afecta principalmente a personas de menos de 45 años. No sabemos si es porque los hábitos de los mayores son más reposados o porque el síndrome afecta más a los padres de niños pequeños o por qué. Esperemos que sea solo por la edad ya que, de ser así, ya estoy más cerca de burlar el síndrome.

Otro de los comentarios es que aconsejan no desconectar del todo durante las vacaciones. De ser así, lo que he hecho durante las mías, conectarme una vez a la semana o un par de veces para revisar los cientos de correos recibidos y clasificar los 10 ó 20 que realmente requerirán seguimiento a la vuelta, podría ser una buena práctica. Aunque quizás sea porque la entrada de la Wikipedia la ha escrito algún jefe de gran empresa ;-).

Un saludo, Domingo.

sábado, 30 de agosto de 2014

98% trabajo

Esta mañana, mientras iba en el coche camino del partido de fútbol, pensaba sobre esa frase que creo haber escuchado atribuida a Picasso pero que muy bien pudiera haber sido dicha tanto por él como por muchas otras personas y/o artistas. La frase vendría a decir que el éxito de un artista era 98% trabajo y 2% inspiración (porcentajes variables, obviamente). Versiones parecidas vendrían a decir que el artista debe trabajar a todas horas para que, cuando llegue la inspiración, le encuentre trabajando.

Muchas veces la gente se atribuye el éxito o se queja del fracaso en un momento dado. Sin embargo, no todos son conscientes de que se están felicitando o quejando justo del único momento en que no deben hacerlo porque es precisamente el momento que no depende de uno mismo.

Por supuesto, hay matices. En un ambiente sociolaboralmente deprimido como el actual, el encontrar o no trabajo no depende o puede no depender tanto de cuáles fueron tus elecciones hace diez o quince años porque la crisis no hace distinciones y lo mismo queda desempleado el más cualificado, simplemente porque no iba de copas con su jefe o a comprar zapatos con su jefa que el menos cualificado, simplemente porque es el empleo menos estable y el primero que, llegado el momento, sufrirá las consecuencias.

En cualquier caso, todos tendemos a pensar (imagino que es evolutivamente positivo) que hacemos las cosas mejor de lo que las hacemos, que los éxitos del azar no son tan azarosos y en los fracasos somos más víctimas que culpables.

Sea como sea, lo que sí que es cierto del 98% al 100% es que el lunes vuelvo al trabajo y que me tocará trabajar también del 98% al 120%. Para esas cosas no hay límite superior o al menos no siempre. Seguiremos informando.

Un saludo, Domingo.

sábado, 23 de agosto de 2014

Cojo y solo en casa

"Crecidito, este Macaulay Culkin estaba ya crecidito y no era esta la única diferencia. Nunca fue rubio, ni siquiera cuando tuvo pelo. Nunca fue travieso o al menos no mucho. Nunca fue un niño prodigio aunque algunos dicen que sí un prodigio de niño. En su casa no había ladrones intentando entrar (espero) ni él debía rechazarlos; su familia no estaba de viaje aunque sí fuera ... "

Eso era lo que había empezado a escribir la semana pasada. Por la mañana había ido al médico quien me diagnosticó lo mismo que otro colega suyo y compañero de partido de fútbol mío: calzado inapropiado que causa la lesión que me mantenía enclaustrado. Sin embargo, de repente se me quitaron las ganas de hacer bromas ni comparaciones con ese otrora niño prodigio y ahora músico (o algo así) que reparte pizzas en sus espectáculos.

Llamé a mi madre y me dijo que mi abuela, en el hospital, se encontraba mal. No solo se encontraba mal sino que el pronóstico era el peor de todos. Diez años después de venir de Chicago, pasando por Madrid, recalar en mi casa donde arreglé un ordenador e ir al hospital a pasar la noche cuidando de mi abuela, ella se nos iba y solo era cuestión de saber cuándo. Fue solo un par de horas después. Entonces no lo sabía pero sí sabía que ya no había diferencia con la película. Ya sí estaba "Solo en casa".

El mal rato pasó, como pasan todos. Y te haces a la idea, no hay otro remedio. Y ves un vídeo y aparecen no una sino cuatro o cinco personas que ya no están y entonces sí estaban. Felices, que es como se les recuerda.

Dije antes "diez años después"; no han sido diez años después. Han faltado tres semanas aproximadamente, las mismas tres semanas que, también aproximadamente, han faltado para que mi abuela cumpliera los 94 años. Esta vez, como la anterior, con la cabeza prácticamente perdida. Afortunadamente ha preferido descansar y hacer descansar. Tuvo muy mala vejez, la vejez que no se merecía; incluyendo esa fase final de la que tanto había pedido a Dios que la librara.

El mal rato pasó, como pasan todos. Y te haces a la idea, y vuelves al trabajo y sales tarde para que tus compañeros tengan todo lo mejor posible durante tu breve ausencia. Y juegas al fútbol y vas de barbacoa. Y verás un vídeo y aparecerán no cuatro o cinco sino más personas que ya no estarán y entonces sí que estaban. Felices, que es como se les recordará.

Un saludo, Domingo.

sábado, 9 de agosto de 2014

La primera de su especie

Era una criatura, si así podía llamársele, recién nacida. Ningún propósito claro en la vida; vagando de aquí para allí, a la deriva de un proceloso océano carente todavía de grandes peligros. No estaba mal, era como un jacuzzi que no podías parar pero que tampoco mareaba a pesar de estar a merced de las mareas. Se hubiera podido sentir eufórica, inmortal y quién sabe si hubiera podido llegar a serlo en aquella sopa primigenia. Después vendrían más como ellas, muchas más y diferentes. Ahí le perdí la pista. Hay quien dice que, sola, acabó suicidándose en algún río de magma o engullida, millones de años después, por alguna otra célula. ¿Quién sabe dónde andarán ahora esos átomos de carbono, hidrógeno, oxígeno, etc que una vez formaron lo que vino en llamarse "la vida en la Tierra"?. Quizás alguno esté dentro del lector. Quizás.

Vuelta a la anormalidad

Sin duda, hoy en día, tener un buen trabajo es algo raro, inusual, infrecuente o anormal. Entiéndase como bueno que tras poner en la romana a un lado todo lo positivo y al otro todo lo negativo, el lado cargado positivamente siente todavía una gran atracción por la tierra mientras que el lado cargado negativamente casi parece repelido por la misma. Lo común, usual, frecuente y normal en los trabajos que la crisis nos ha dejado es que ambos lados de la balanza parezcan estar casi alineados.

Así pues, la vuelta al trabajo esta semana ha supuesto para mí la vuelta a la anormalidad. Un primer par de días algo más ajetreados, influidos e influenciados por la época estival, temporada alta para el negocio; el resto de la semana buscando un punto de inflexión que presagie un lento declinar hacia el siguiente punto de inflexión que tendrá lugar dentro de unos cuantos meses. El punto de inflexión quizás tarde un par de semanas (o tres o cuatro) en llegar, pero llegará. De igual forma hablo de "punto" en singular pero tendría que hablar de "puntos" en plural. Cada rol del equipo tiene el suyo propio. El "punto" del que yo hablo posiblemente se pudiera entender como el centro de masas de todos esos "puntos" en plural.

Por lo demás, la adaptación ha sido rápida aunque no sé si más o menos que siempre. En dos semanas de vacaciones te da tiempo a desconectar pero no del todo. Es posiblemente la cantidad perfecta. Tuve que consultar el correo un par de veces durante las vacaciones con el fin de hacer más suave esos primeros días. Surtió efecto aunque en realidad no sé si hubiera sido mejor aumentar el grado de desconexión a expensas de que esos par de días hubieran sido más intensos.

El resto de las vacaciones se quedan ahí esperando nebulosamente distribuidos entre el final del mes y las próximas Navidades. Puntos pendientes, el que más las visitas a los amigos descuidadas en muchos casos por ambas partes. Ayer asistí a una boda. En mi mesa compañeros de estudios o trabajo del novio. Amigos recientes. Yo jugaba en otra liga. Amigos de la infancia. Es de las pocas amistades de la infancia con trato relativamente frecuente y continuado (a estas alturas casi no se puede aspirar más que a verse una o dos veces al año). Otra anormalidad.

Tras acostarme tarde, esta mañana fui a jugar al fútbol con muchos de esos amigos de corto o medio plazo. Con la mayoría de los cuales la relación de amistad se reduce simplemente a esos partidos de fútbol. Es posiblemente otro tipo anormal de amistad. Tan anormal como normal era estar acalambrado a la hora de empezar el partido. Me ocurre siempre que no he descansado lo suficiente. Sin embargo esta vez decidí dosificarme y que los calambres no fueran a más. Y no será, ni de lejos, la última anormalidad del día. Todavía queda día y muchas posibilidades y certezas de anormalidades, alguna de ellas quizás ya hasta normales. Pero esa parte del día no está escrita todavía, no como esta entrada, anormal entrada, que aquí toca a su fin.

Un saludo, aunque este de los normales, Domingo.

sábado, 2 de agosto de 2014

Toda una vida

Llevaban toda la vida juntos; no podía recordar un segundo en que ella no estuviera allí. Lamentablemente tampoco podía recordar un segundo en que él hubiera significado algo para ella. No, imposible recordarlo. No existía ese segundo, no podía existir. De haber existido, hubiera podido recordarlo no ya como un segundo sino como otra vida de extensión mayor a la propia. Sin embargo, todo podía cambiar. El miércoles ella cumpliría 5 años y su madre, casi tan guapa como ella, le había pedido a su homóloga que lo llevara a la fiesta. Iría con un regalo tan grande como su amor y todo, todo cambiaría.

Un saludo, Domingo.

Socializando

"Nunca he sido el alma de la fiesta. Que en España seamos bebedores y hasta fumadores sociales tampoco ha ayudado a ello. Sin embargo reconozco que quizás fue por no encontrarme en los círculos adecuados ..."

Eso es lo que empecé a escribir hace más de un mes y lo que dejé en el borrador para que no se me olvidara. ¿Qué motivó dicha frase?. En este caso fue la fiesta de empresa. Me lo pasé bien antes (hubo concursos, mi equipo ganó y eso siempre contribuye), durante y después. Iba junto a un compañero al que tendría que llevar de vuelta al acabar la cena para no ir con los dos coches al lugar del evento. Íbamos con la convicción de que nos volveríamos pronto porque ninguno de los dos es muy dado a tales festejos. Y así lo hicimos.

Sin embargo, reconozco que aquella noche me hubiera quedado un poco más. Es una sensación que, aunque ya conocida pues me ha pasado otras veces, no deja de ser poco habitual. Me pregunto cuáles son los ingredientes de ese cóctel y me imagino que los mismos que haces que quieras estar con una compañía y no con otra. Y me imagino también que es más fácil cuando esas personas no beben o beben con tal moderación que su discurso no se ve modificado durante ese tiempo. La exaltación de la amistad y demás síntomas asociados a la excesiva ingesta alcohólica nunca me han parecido atrayentes.

Así pues, aquella noche me hubiera quedado un poco más. Lo suficiente como para que el alcohol calentara los cuerpos de los compañeros que vinieron del frío. Aunque no solo a los que beben vodka como si fuera agua, posiblemente también a los que prefieren la cerveza. Por lo que me contaron después, la fiesta acabó por do suelen y esos lares sí que no me son afectos. Al menos no del todo. Ahora que toca volver al trabajo tras las siempre escuetas vacaciones, tocará también volver a comer con antiguos y nuevos compañeros. Tocará socializar y, tiempo mediante, que la próxima fiesta pueda ser como la anterior.

Un saludo, Domingo.

jueves, 31 de julio de 2014

Párrafo del día

Ahora escucho Vaughan radio de camino al trabajo o al volver del mismo. Sobre todo a la vuelta, hay un programa entretenido que presenta un canadiense que relata unas experiencias con una particular voz que, juntando contenido y continente, me hace pensar que es todo un personaje.

Las secciones del programa son fijas y variadas y versan sobre errores comunes, pronunciación, ortografía, vocabulario en general, vocabulario para taxistas o lectura de párrafos. Esta última se llama "Paragraph of the day" y no consiste sino en la lectura de uno de los párrafos del siguiente libro:
http://es.scribd.com/doc/72809421/198-English-Paragraphs-Vaughan-Systems-for-Varied-English-Exercises

En uno de ellos, leído por el locutor hará uno o dos meses, el escritor de los párrafos (el propio Richard Vaughan) describe cómo los escribe. Le llevaba, no sé, unos 5 minutos escribir cada uno o unos 20 minutos escribir cada página del libro que debía tener 4 ó 5. Aprovechaba cualquier tiempo libre para hacerlo y, si alguien llamaba, pedía a su secretaria que le comunicara que estaba ocupado pero que le devolvería la llamada en solo unos minutos.

Me pareció una buena idea para dar clases de inglés pues permite en solo unas frases condensar vocabulario, expresiones o giros idiomáticos que solo se adquirirían leyendo, leyendo y leyendo hasta que dieras con algo parecido. Es como una píldora concentrada de literatura enfocada a la enseñanza.

Y también me gustó la idea para mí. De igual forma que, cada vez menos, escribo un soneto o un soneto aleatorio, estos parrafillos del día son como cuentos cortos con cualquier cosa como pre-texto. Así pues, aquí va el primero:

Tenía un ajado y raído sombrero de paja que había tomado prestado de un espantapájaros. Su edad, indefinida, con una lentitud de movimientos engañosa que hacía pensar que algo en su interior refrenaba a una manada de purasangres a punto de desmandarse y de empezar a como alma que lleva al diablo. Venía de todos sitios y a todos sitios iba; no conocía a nadie y nadie lo conocía. 

Un saludo, Domingo.

sábado, 5 de julio de 2014

Humanidad

En las últimas dos semanas he leído algunos artículos que han llamado mi atención. Recuerdo el primero solamente con cierto detalle. Trataba entre otras cosas de las personas y cómo ellas ... bueno, cuando digo con cierto detalle es solo eso, cierto detalle.

Lo que sí recuerdo es que me sentí identificado con una parte del mismo, una de las primeras pues era un artículo largo. Venía a decir que todos, ayudados por la evolución, buscamos perpetuarnos. Siempre he pensado que de ahí venía el típico dicho de "Tener un árbol, plantar un libro, escribir un niño". Y si no era ese, sería uno parecido, sin duda.

Por esas mismas razones, llegado el momento (para unos antes y para otros después), lo que nos preocupa es dejar a nuestros sucesores (en el sentido amplio de la palabra) el mejor planeta o la mejor sociedad posibles. Tiene todo el sentido del mundo. La evolución no solo "beneficia" a aquellos que buscan el bien propio sino también a aquellos que buscan el bien común. Ese "beneficio" doble es compatible y hasta necesario que ambos se produzcan a la vez. Como dice aquel dicho, "Si quieres llegar pronto, camina solo; si quieres llegar lejos, camina acompañado". Dependiendo de las circunstancias y durante milenios una sociedad va a tener que enfrentarse a ambas, dicha sociedad necesitará de máximos exponentes de una y otra característica y una gran masa de grises.

¿Cómo me afecta eso?. Pues imagino que como a todos, con lo que solemos llamar la crisis de los 40 (ya es sabido que a mí la crisis de los x0 me suele llegar bastante antes). Para algunos, digamos que los prebostes del egoísmo, quizás se trate de comprarse un descapotable y dudar entre cambiar a su mujer por 2 de 20 o esperarse a los 50 para cambiarla por 2 de 25. Para otros, los que más admiración a la vez que incomprensión me provocan, se trata de irse a vivir al campo cuando no al tercer mundo. Para mí, no lo sé muy bien pero posiblemente se limita a donar lo que no me hace falta para calmar mi conciencia mientras pienso que ni me voy a comprar el descapotable ni voy a retirarme de la vida pública de la que nunca he sido muy partícipe.

Lo que sí hago es leer algún que otro artículo y pensar que, algo que ver, tiene. Por ejemplo, en la revista Naukas en su segunda edición, leída más de medio año después de recibirla, he podido ver cálculos de cómo la vida en la Tierra sigue viva casi por casualidad (un enésimo acierto en esa carambola a miles de millones de bandas que supone la existencia de ese pálido punto azul. De igual forma que he leído acerca de probabilidades de que diferentes "pepinos" estelares produzcan una carambola que ya no nos guste tanto. No solo eso, en el eventual e improbable caso de que dentro de unos cuantos miles de millones de años todavía sigamos por aquí y a la estufa se le acabe el hidrógeno, tendríamos que ir buscando formas de viaje rápido ... a velocidades cercanas a la de la luz. Esas velocidades que, siendo astronómicas, pun intended, parecen de caracol cuando nos referimos solamente a las estrellas más cercanas, por no hablar de las galaxias con planetas que se nos antojan habitables.

Un saludo, Domingo.

sábado, 21 de junio de 2014

Fin de ciclo

Mirando solo el título, la rima podría estar relacionada con el fútbol; pero nada más lejos de la realidad.

Amargos jirones de memoria,
Sendas miradas del Guadiana,
Borrarán anoche por la mañana;
Pinceladas de penas y gloria.

En la historia de la intrahistoria,
Mil lisas arrugas y una negra cana,
Pocas sedas y mucha pana,
Cortito de café, largo de achicoria.

En la forja de la vida
Hay hierro y hay escoria,
Poco príncipe, mucha rana,
Vívida vida vivida,
Mezcla de llanto y euforia,
Mezcla de gana y desgana ...

Y ambas, un día, se acaban.

sábado, 14 de junio de 2014

Construir con bolas de pintura

En el mundo empresarial son muy conocidas las reuniones de "Team building". En su mínima expresión lo definiría como poner a un equipo que normalmente trabaja junto (no necesariamente unido) a divertirse a la vez. En una expresión algo más elaborada añadiría que la actividad puede estar encaminada precisamente a que el equipo trabaje unido. A darse cuenta de que pueden confiar los unos en los otros y de que, si viene mal dadas, tendrás detrás a alguien que cubra tu espalda y no te apuñale.

Actividades para construir equipo hay muchas. Una de ellas es el Paintball. No sé si surge para eso o simplemente para evadirse y para sublimar ciertos impulsos que no llegamos a domesticar del todo. En cualquier caso, es una actividad que posiblemente vale para ambas cosas, para pasarlo bien y para hacer o construir equipo. Claro que el hecho de que una herramienta valga para un propósito no significa que siempre se utilice bien. Ni siquiera que la gente sepa usarla por defecto.

Algo así pasó las dos veces anteriores que jugué al Paintball en mi antigua empresa. El juego era aburrido y la selección de equipos (prácticamente aleatoria entre un conjunto más que heterogéneo de personas) también dejaba que desear. Tras dos fiascos así, yo era más que reacio a jugar. Incluso pensé en ofrecerme a cambiar mi puesto por alguien de otro equipo que sí se acercara a la actividad con el entusiasmo que a mí me faltaba.

Esta vez, sin embargo, fue diferente. El equipo de 14 personas era fundamentalmente el equipo con el que suelo trabajar. Ciertamente con unos tienes más afinidad que con otros y aunque en un equipo que podríamos considerar pequeño es fácil deducir cómo es cada persona, verlas en un ambiente fuera del trabajo te puede proporcionar alguna que otra pista que confirme o ponga en duda lo que crees que sabes. No hubo gran novedad en ese sentido. Lo que sí hubo fue una camaradería especial en los planes de defensa, ataque y apoyo a aquellos soldados que continuaban en liza tras haber sido tú alcanzado por alguna de esas bolitas amarillas.

Me divertí; sin duda me divertí. Solo hay que ver mi sonrisa en la foto que me sacaron tras haberme "matado" en uno de los escenarios.

Por no hablar de mi cara cuando conseguí hacerme con el maletín y correr hacia mi base en el primero de ellos en la versión más típica de un "Capture the flag". Bueno, en esa imagino que también aparecería sin aliento además de contento.

¿Alguna pega?. Bueno, las armas, los escenarios de guerra ... los niños que celebran allí sus cumpleaños y los padres que allí los llevan. Veo alguna de esas fotos y no puedo dejar de pensar en los niños soldado de África. Sí, podría ser mejor. Sin embargo, teniendo en cuenta que yo mismo he jugado a juegos en el ordenador contra otros compañeros cuando no amigos donde el único objetivo era ser el que mataba a más de ellos después de un cierto tiempo, comprendo que esto no es sino un juego y espero y deseo que así lo entendamos todos, sobre todo los padres de los niños que van a celebrar allí su cumpleaños. No vaya a ser que construyamos un equipo pero unos años después alguien coja un arma del tipo que sea y nos monte aquí una de esas que tan lejos nos parecen cuando suceden en EEUU ... o en Noruega.

Un saludo, Domingo.

Más años sin ellos que con ellos

En Mayo de 1995 murió Lola Flores. Un par de semanas después moría su hijo Antonio con 33 años. Sin embargo no es por esto por lo que recuerdo (y recordaré) este año. Unos días antes de Lola Flores y unos después de Antonio, murieron primero mi tía con 54 años y luego mi abuelo con 72. Yo tenía entonces 18 años y hace ya de esto 19. Más años sin ellos que con ellos.

Por otro lado, hace un par de años murió el padre de un amigo. Hablando con otro comentamos que, por esos caprichos que tiene la genética, comenzaba para nosotros la etapa de asistir a entierros de padres de amigos y conocidos. De igual forma, hace un par de semanas hablábamos en el trabajo. Los más jóvenes comentaban que cada año tenían que planear las bodas, bautizos y comuniones a los que asistir. Mi jefe decía que sus hijos ya estaban mayores, sus amigos (los de mi jefe) más y que él asistía ya a más funerales que bodas.

De hecho, echando cuentas, mi edad no difiere demasiado de aquella que tenía mi madre cuando murió mi abuelo. Afortunadamente mi padre está, por ahora, relativamente saludable (aunque solo relativamente). Sin embargo, nada evitará el implacable, inexorable e ineluctable transcurrir del tiempo. Dejado ya atrás el 40 de mayo, los días de calor serán legión ... durante un tiempo. Durante ese tiempo comeremos uvas e hijos. Luego refrescará algo y luego vendrá el veranillo del membrillo anunciando más frescor y lluvia, vivífica lluvia y mandarinas y naranjas y uvas, más uvas. Pero esta vez para celebrar el consumismo en grado extremo. Y luego hará frío; en unos sitios más que otros pero frío. Y lloverá y saldrán las flores hasta en la basura como en la canción de Fito.

Y entonces se cumplirán no ya 19 sino 20. Más años sin ellos que con ellos. Es triste pero al menos espero que sea así durante mucho tiempo. Todo el tiempo que yo pueda estar en plenas facultades físicas y mentales, como mínimo. No pensaba yo en estas cosas hace 19 años pero es que hace 19 años no era más que un niño.

Un saludo, Domingo.

sábado, 31 de mayo de 2014

Pequeñas alegrías y grandes tristezas

El sábado pasado tuve sentimientos encontrados. Como digo, escuché el partido con una mezcla de deseo por que el Madrid marcara, fruto de mi "pasado" madridista y el deseo de que el Atlético, un equipo que ha hecho muy bien las cosas también lo hiciera. El gol del 2-1 fue posiblemente el máximo exponente de esto. A pesar de que otros tenían clara la victoria del Madrid tras el empate "porque el Atlético iba sin gasolina", yo pensaba que ese carácter indómito que ha demostrado el Atlético durante toda la temporada volvería a reaparecer durante los 30 minutos siguientes. Obviamente me equivoqué.

Y tanto que me equivoqué que después siguieron otros dos. Los tres goles debidos a los problemas físicos de los atléticos, no a una gran combinación, un magnífico regateo y un tiro preciso y precioso. Mientras caían los goles me iba sintiendo peor, empatizando cada vez más con esas personas que durante 93 minutos pensaban que iba a ir a Neptuno a celebrar la primera Champions de su equipo.

Al día siguiente; el mal rato se me pasó al día siguiente al pensar que la derrota podía deberse en gran parte a errores del técnico. Curiosa la forma que tiene nuestra psique de excusarse por ciertos comportamientos. Y durante los días siguientes, a pesar de no ver nada en Televisión, evidentemente no pude abstraerme de las celebraciones por la décima y un supuesto (y no tan supuesto) nuevo himno. Eso, por cierto, merece capítulo aparte. Intentar comparar ese himno con el de Plácido Domingo o el de El Arrebato, por mucho que sean totalmente antagónicos, es simplemente imposible.

Sin embargo, todas esas alegrías o tristezas no han sido nada. No son sino esa "vida" entendiendo la vida como lo que hacemos mientras intentamos alcanzar nuestros objetivos y por tanto, aunque sea parcialmente, como algo prescindible; totalmente prescindible.

Hoy he leído un mensaje atrasado en un foro. En el mensaje se alertaba a los miembros de la muerte de uno de ellos. Alguien con quien en su momento tuve diferencia de pareceres, siempre desde la más cordial de las posiciones por mi parte y alguna que otra vez desde una posición no tan cordial por la suya, pero fruto sobre todo de la enfermedad que padecía.

La noticia de esa muerte, como la de cualquier otra persona con la que has tenido un cierto trato, aunque sea por Internet, ha sido de una gran tristeza. Una gran tristeza acompañada de recuerdos, más buenos que malos. E incluso los menos buenos, como digo, no se los tenía en absoluto en cuenta. De hecho, no hace mucho me acordaba de algo que me dijo en uno de esos arranques. Pensé en que se equivocó pero tampoco se quedó tan lejos. Y pensé que ningún deseo suyo, con independencia de que fueran hechos de forma consciente o influenciados por la enfermedad me haría tomármelo a mal. En el peor de los casos simplemente sería algo que ignoraría. No sé si llegué a pensar en lo que le diría de encontrármelo. En cualquier caso ya no será necesario que lo piense. Solo espero que descanse en paz tal como dicen que está haciendo algunos de sus/mis amigos aficionados a lo paranormal.

Un saludo, Domingo.

sábado, 24 de mayo de 2014

La décima y Europa

La décima ... o la primera del Atlético de Madrid. Hasta dentro de un rato no lo sabremos. Lo que sí sabemos es que hace diez años me apasionaba más el fútbol. Bueno, no sé si me apasionaba más pero al menos sí lo seguía más. Entonces hubiera visto una final de copa de Europa que tuviera como protagonista a un equipo español, aunque solo hubiera sido durante un rato. Y si era el Madrid el que llegaba a la final, posiblemente lo hubiera visto casi entero. Sentado delante del ordenador mientras que, de reojo, prestaba atención al partido al que mi padre y mi hermano prestaban toda su atención.

Ahora estoy escuchando la radio y eso haré posiblemente hasta que empiece el partido y quizás algo después. Luego no sé qué pasará. Lo que sí sé es que el lunes iré a trabajar y una Copa de Europa más o menos, un partido más o menos disputado o un un millonario más o menos alegre no harán que cambie la forma de conciliar el sueño.

Quizás sí lo haga el partido de esta mañana pero por la forma en la que haya contribuido a mi cansancio diario. Hoy no he estado a tope pero sí que he jugado casi todo el partido a medio gas y la rodilla no se me ha resentido. Buenas noticias. Incluso he marcado de un punterazo a toda la escuadra. El próximo calculo que llegará en el próximo año o así.

¿Se puede sacar alguna conclusión de estos escasos datos?. Pues sí, que si puedo filosofar es fundamentalmente porque me encuentro en una situación privilegiada con respecto a otros. Ciertamente hay otros que están igual o mejor y viven el fútbol como si jugaran ellos mismos. ¿Algo más?. Pues sí, que mañana iré a votar.

¿Pero de verdad eso se puede colegir del texto inicial?. Pues no, ciertamente no. Al menos no de forma directa. Pero tampoco espero que nadie me lo recrimine :-). Así que sí, mañana votaré en las elecciones europeas. Y como ha ocurrido en los últimos seis años o así, no votaré ni a PP ni a PSOE sino a alguna alternativa seria de esas que todavía no nos ha defraudado aunque solo sea porque no ha conseguido poner las manos en el poder. Mis favoritas desde hace tiempo han sido Ciutadans/Ciudadanos y UPyD. Sobre todo la segunda, a decir verdad. Sin embargo, esta vez me decantaré por la primera. Parcialmente porque su candidato es Javier Nart, aquel mismo de Tribunal Popular y luego tertuliano.

Siempre que le he escuchado me ha gustado lo que ha dicho. Algo así como cuando he escuchado a Rosa Díez. Sin embargo, quizás pensando en un voto útil o quizás simplemente porque un español no catalán puede votar a un partido nacido (y durante mucho tiempo radicado solamente) en Cataluña. Esto no debería tener nada de novedoso pues siento a Cataluña y catalanes igual de cercanos que Extremadura y sus extremeños pero todos sabemos de las tensiones independentistas de Europa (de las cuales las Españolas son casi de risa) y prefiero que me represente alguien que conozca ese problema (el independentismo de cualquier forma).

Esta noche tendremos campeón de Europa y mañana tendremos eurodiputados. A ver si gana mi equipo ... mañana.

Un saludo, Domingo.

sábado, 17 de mayo de 2014

Saludados

Acaba la semana con la reafirmación en la convicción de que soy muy afortunado a pesar de que en algún momento me pueda olvidar de ello. Acaba también con la reafirmación en la convicción de que en mi vida he debido tomar decisiones buenas y malas pero ahora mismo solo recuerdo las buenas. Y acaba también con la reafirmación de que las personas pueden cambiar. A veces es solamente producto de la edad y otras veces producto de la voluntad. Todo el mundo cambia y muchos de los que no lo hacen es porque lo hacen para peor. En mi caso imagino que algunos de mis cambios habrán sido para mejor y otros para peor.

Por ejemplo, esta semana salté de forma pública en la reunión de comunidad expresando mi indignación por la actitud de varios asistentes que según parece van a la reunión de comunidad a insultar con palabras más o menos gruesas, con directas o indirectas a otros. Al principio intenté poner algo de orden pero visto lo visto me limité a estar allí y votar cuando fuera necesario votar, indiferente a aquello que me producía vergüenza ajena. Podría comentar más detalles pero me canso solo de recordarlo así que intentaré emplear mi tiempo en algo más interesante.

Interesante como la entrevista que escuché esta mañana camino al partido de fútbol. En un momento dado cambiando de Radio Vaughan a Onda Cero escuché a un hombre mayor hablando sobre boxeo. Me dio la sensación de que le faltaba cierta soltura al hablar y pensé que quizás habría sido boxeador en el pasado. Sin embargo, algunas otras cosas que decía o sobre las que hablaba me hacían sospechar que no era un sonado a pesar de que dormía 9 horas diarias o quizás precisamente por ello.

La entrevista es muy interesante, tanto como el personaje. Cuando era poco más que un niño, no leía periódicos. En eso no he cambiado mucho. Sin embargo, cuando caía en mis manos el Diario Sur, casi siempre miraba la contraportada porque allí aparecía Manuel Alcántara con sus más que atinados comentarios.

En la selectividad, en el comentario de texto, me pusieron un texto de alguien, posiblemente alguna articulista, ¿quizás Carmen Rigalt?. No recuerdo qué dije pero sí recuerdo que lo comparé con aquellos pocos que había leído de Manuel Alcántara. Recuerdos de adolescente.

Hace siete años, según acabo de comprobar, leí que su mujer había fallecido y que él, muy unido a ella, se encontraba muy abatido. Recuerdos de juventud que se escapaba camino de la mediana edad

Hoy, citando a un escritor catalán si no recuerdo mal, me ha dejado otro recuerdo; me ha dejado otra frase: "Hay amigos, conocidos y saludados". Y, por supuesto, la que frase que destacan en la propia web: "Cuando llegue mi hora, que me encuentre vivo".
http://www.ondacero.es/te-doy-mi-palabra/desayunos/manuel-alcantara-cuando-llegue-hora-que-encuentre-vivo_2014051700020.html
Acabo de editar la página de la Wikipedia para añadirla:
http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Alc%C3%A1ntara_(1928-)#Frases_y_citas

Toda una declaración de intenciones, sobre todo si tenemos en cuenta lo que escribió cuando falleció su esposa. Copio de la página de la fundación Manuel Alcántara:

El 20 de noviembre de este mismo año, fallece su esposa Paula Sacristán. Tras unos días en los que interrumpe su trabajo, vuelve el 26 de noviembre con el artículo "Estos días” en el cual se refiere a su pérdida: «A mí también me han pasado cosas estos días. La más importante que podía ocurrirme. Podría decir que ya están solos mi corazón y el mar, pero ya lo dijo alguien que expresaba mucho mejor que yo sus sentimientos. Además no sería verdad. Yo soy solo, pero no estoy solo. Vuelven rápidos fotogramas. Quizá el tiempo sea plano. Estoy algo aturdido, con esto de mi memoria histórica personal. “La vida sigue”, me dicen mis amigos. La verdad es que no estoy muy seguro. Según a lo que llamemos vida.»

Pero volviendo a la entrevista, no he podido sino acordarme de mis vecinos de comunidad con eso de los "saludados". Considero que tengo muy pocos amigos, algunos más conocidos (aunque tampoco muchos) y, sobre todo, muchos saludados; todos los demás. Lo contrario para mí sería simplemente falta de educación, independientemente de cómo sea la persona. El ejemplo más claro está justo ahí en esa comunidad de vecinos. Me demandaron simplemente como mal necesario para poder demandar a alguien con quien estaban (y están) enemistados. La persona que procesó la demanda, si no la urdió, me dijo que pensaba que yo le dejaría de hablar. Yo le contesté lo mismo que he contestado en otros foros. Yo no me rebajo a retirar la palabra a nadie. No debió entender lo importante que es la educación en la vida, al menos para mí, porque este martes volvía a engrasarse esa máquina de filias y fobias que es una comunidad de vecinos.

Al día siguiente, al salir para el trabajo, me lo encontré y le comenté abiertamente la vergüenza ajena que todo aquello me causaba. La respuesta fue tan simple como decir que mi postura era muy cómoda, que había que mojarse, que había que moverse y trabajar en favor de la comunidad. Detalles sin importancia aparte, de nuevo no apreció que, al igual que en Juegos de Guerra, hay juegos en los que la única forma de ganar es no jugar. Otro de esos juegos es el fútbol "profesional" y todas sus pasiones. Mientras escribo esto Barcelona y Atlético se juegan el título de liga pero en vez de 90 minutos por delante tan solo les quedan un par de ellos. Durante el partido, desde la casa de mis padres, me ha sido imposible no escuchar a los vecinos que viven el fútbol posiblemente de forma más intensa que cuando tienen hijos, los mismos hijos a los que llevan al fútbol y enseñan a insultar al árbitro de la misma forma que ellos han hecho hoy cuando el árbitro ha anulado un gol del Barcelona por fuera de juego.

Ese juego también lo pienso ganar porque tampoco pienso jugar. Esas personas tienen pocas posibilidades de pasar de la categoría de Saludados a la de Conocidos. A todo esto, felicidades a los atléticos, incluso a esos que también insultan a los árbitros ... supongo. En cualquier caso, a los que no insultan a los árbitros desde el sofá, seguro.

Un saludo, Domingo.

sábado, 10 de mayo de 2014

Cuestión de modas y tiempo

Hace dos días, como aquel que dice, hablaba del accidente de Fukushima y cómo la prensa se haría eco durante unos meses de aquello para luego caer en el más negro olvido. Algo más de tres años hace ya de aquello y también algo más de tres años hace que yo me tenía que buscar la vida para seguir informándome de lo que me interesaba porque los medios de masas no ayudaban. Lo comentaba aquí. Sin embargo, esa falta de interés por ciertas cosas es algo que solo puedo criticar parcialmente ya que quizás para otras personas toda la cobertura que se hace de algún hecho es mucha. Eso mismo me pasa a mí cuando veo alguna noticia relacionada con el mundo rosa, por ejemplo.

El caso es que hoy ya no se habla de Fukushima, hoy se habla de Boko Haram. He buscado Boko Haram en Google y la gran mayoría de los artículos eran de hace uno o dos días y en ellos se explicaba lo que ocurrió hace tres semanas o simplemente quiénes son y quién es su líder. Yo acabo de escuchar el relato que Carlos Alsina hizo el 1 de mayo. http://podcast.ondacero.es/mp_series1/audios/ondacero.es/2014/05/01/00036.mp3

Al propio Alsina le escuché hará un par de meses hablar de Boko Haram y sus matanzas. Es por eso que esta vez, las horrorosas noticias, no me sorprendieron en cuanto a los detalles de su autoría o al menos no tanto. De hecho, caigo ahora en que la serie televisiva Newsroom sale algo ambientado en el 2012, posiblemente, que bien pudiera estar relacionado.

Sea como sea, la noticia despierta en mí numerosos sentimientos. Por supuesto los humanos. La noticia lo tiene "todo". Una secta despiadada, más de doscientas personas que para colmo pertenecen al estrato más débil. Apenas mujeres, niñas de 14 ó 15 años, en un país no desarrollado, islámico o al menos en una región mayoritariamente islámica del país. Y la guinda del pastel, ¿el motivo?: Querer estudiar.

Pero además de los humanos y sin dejar de ser humanos, despierta también otros sentimientos. Por ejemplo, me reitero en que somos unos absolutos privilegiados por vivir en este tiempo y en este lugar. Pero también me asaltan otros como qué es lo que hace que nosotros seamos nosotros, una pregunta que ya se han hecho miles de voces más autorizadas, clásicos entre ellos, y no seré yo quién ose dar una respuesta. Me limitaré a manifestar mi alegría por ser yo quien soy y ser mi perro quien es, a pesar de que me alegre ver al perro y a él le alegre verme a mí. No termina de gustarme la comparación, sobre todo porque, al contraponerlo a lo horroroso de la noticia de Nigeria, puede dar una cierta sensación de frivolidad. Sin embargo, espero que se entienda.

Bueno, eso y mi asombro cuando pienso en eso de que somos polvo de estrellas, que nuestros átomos se forjaron en núcleos de estrellas hace muchos miles de millones de años y que nuestro ADN no es sino el fruto de la casualidad y el mezcla que te mezcla durante miles de años. Y el de mi perro más, pues no en vano la vida media de un perro es menor. Y si la de un perro es corta, la nuestra no deja de ser efímera. Con más o menos años, pero efímera.

Pero a pesar de la brevedad nos da tiempo a hacer muchas cosas. Algunas buenas y muchas, como las de Nigeria, malas; con gran cantidad de ellas agolpadas en épocas, cuestión de modas y tiempo.

Un saludo, Domingo.


sábado, 3 de mayo de 2014

De película

Desde hace un par de semanas a veces, solo a veces, tengo la sensación de estar en una película o de ser testigo de la filmación de una. A veces paseo por la calle y veo personas a las que no conozco, del mismo modo que tantos protagonistas de películas de autor que pasean por calles viendo a personas que no conocen. Y me pregunto si serán reales pues me asaltan las dudas. No sé si el razonamiento fue parecido pero imaginemos que sí. Imaginemos que el razonamiento que Descartes siguió para concluir su famoso "Cogito ergo sum" fue parecido al mío y no precisamente porque el mío fuera primero sino porque imagino que es un pensamiento que puede asaltar a mucha gente, filósofos, directores de cine ... o lesionados jugadores de fútbol tan aficionados como malos que se ganan la vida en empresas de software tras haber estudiado matemáticas.

Por otro lado, imbuido por ese mismo estado de ensoñación, a veces me pregunto también por las personas que me rodean, independientemente de mi relación e interacción con ellos. Y me pregunto por las personas que me han rodeado y mi relación e interacción con ellos empezando desde la niñez. De niño, como todo, tenía mis familiares, amigos y conocidos. Los familiares no los puedes elegir, tampoco de mayor así que los sacaremos de la ecuación. Los conocidos pueden llegar eventualmente a ser amigos o incluso sin serlo a ser puntualmente importantes en tu vida. Con los amigos acabarás finalmente teniendo una relación de contacto más "espaciado", acabarán desapareciendo o acabarán estando a tu lado toda tu vida, según casos y personas. Alguna vez creo que he comentado que me gustaría ver los "viajes" de diferentes personas en Google Maps para ver cómo acaban coincidiendo puntualmente en diferentes sitios y momentos.

Y ya por último, un tercer pensamiento que me asalta o quizás una duda es: ¿qué caminos ha seguido ha cada persona para llegar al estado actual?. Por ejemplo, quizás había un niño brillante pero poco ambicioso que vive actualmente de las rentas de un piso alquilado que heredó de sus padres. O quizás era un niño simplemente inteligente pero cruel y despiadado que ha ido subiendo en la escala empresarial gracias a su buen hacer en el uso de la faca. O quizás era un niño que no destacaba en absoluto pero que supo estar en el sitio exacto en el momento adecuado ... en los sitios exactos en los momentos adecuados, rodearse de las personas correctas y ahora son gurús simplemente con lo que han vivido y/o aprendido. Quizás haya muchas personas en los comités de dirección de grandes empresas que se correspondan con este tercer estereotipo. ¿Y el mío?. Posiblemente ninguno de esos o una adecuada mezcla de todos y alguno más. Como un remake de películas de autor... un remake único, tan único como cada uno de nosotros.

Un saludo, Domingo.

sábado, 19 de abril de 2014

Tergiverso converso

No soy muy "manantero" aunque guardo un total respeto a aquellos que lo son como muchos de mis compañeros de fútbol de los jueves o parte de mi familia. Por este motivo, he intentado mostrar lo que podría sentir si fuera un pelín más extremo ... o quizás es lo que siento pues no lo tengo muy claro :-D.

En esta semana cofrade,
Uno de buena mañana,
Parece el marqués de Sade,
Cuando el sado le sale rana.

Empezando entre palmas,
Gritos, vítores y la borrica,
Vienen miles de almas,
Y yo mirando a la barrica.

Mas tampoco me da lo mismo,
Aunque me guarde las ganas,
De unirme solícito al desmadre.
Es cultura, fiesta, turismo,
Y acabar, acabará mañana,
Cuando Jesús resucite ... según me recuerda mi madre


2048

En las últimas semanas se ha puesto de moda un juego muy simple a la vez que adictivo. A estas alturas imagino que la mayoría ya lo conocerá. El juego se llama 2048 y con tal nombre uno empieza a sospechar que puede tener que ver con el número dos y sus potencias. El juego está disponible tanto en versión móvil como en versión web.

Todo empieza al ver en un par de pantallas de ordenador de compañeros de trabajo una ventana con el susodicho número. Al ver que era algo que se extendía, busqué en Google y no me costó trabajo comprobar que, efectivamente, era un juego y que de él hablaban en numerosas webs por su viralidad. Un par de días después me lo bajé en el móvil y empecé a probarlo. Efectivamente es adictivo. En alguna de esas noticias había leído, creo que citando palabras de su autor, que solamente el 0,5% de las partidas acababan en éxito.

Quizás sea solo una táctica propagandística o quizás sea verdad pero en mi caso debí necesitar unos cuatro o cinco intentos hasta que llegué a los 1024 y quizás otros tantos hasta que conseguí el dichoso 2048. Sin embargo, lo que más me llamó la atención del caso fue mi estrategia para resolverlo. Recuerdo que, cuando era un niño, me encontré con la problemática de resolver aquellos puzzles en los que había una pieza hueca y el resto se podía deslizar para o bien ordenar o bien desordenar el conjunto. En aquel caso, tras intentarlo infructuosamente, me puse a analizar el problema y encontré ese par de trucos que hacían falta. El primero para acabar las dos últimas piezas de cada fila y el segundo para acabar las últimas dos filas.

En este caso, no hizo falta que me parara a analizar el problema. En este caso la solución se presentó cuando intentaba montar mi primer 1024. De forma inconsciente había ido creando el 512, el 256, el 128 y quizás el 64. Junto a ellos, un montón de doses, cuatros, ochos ... que convenientemente alineados podían sumarse hasta conseguir 1024 y dejar medio tablero libre. Dicho de otra forma, fue un descubrimiento involuntario o pasivo.

Y me pregunté si realmente esto era indicativo de algo. Por supuesto que mi forma de pensar ha ido evolucionando con el tiempo y que todavía tendrá que hacerlo mucho más. Parcialmente por las vivencias y parcialmente por el inexorable paso del tiempo y sus efectos en la biología humana. Estoy convencido de que haré alguna de las cosas que critico en mis padres. Pero a pesar de todo me pregunté si había cambiado "tanto" mi forma de pensar como para afrontar dos problemas similares de forma tan diametralmente opuesta.

En un primer momento pensé que posiblemente sí pero luego, pensando al respecto, no estoy tan seguro. Por ejemplo, ¿cuál fue el método que utilicé hace 30 años para aquel puzzle?. ¿Estoy realmente seguro de que todo ocurrió así o quizás ocurrió tal como ha ocurrido ahora pero no lo recuerdo así?. Por otro lado, independientemente de si lo resolví de forma más o menos analítica, también es cierto que siempre me ha llamado la atención (o así lo recuerdo) un enfoque más práctico y que una aproximación más activa desde el punto lúdico puede ser entendida como más pasiva desde el punto de vista analítico.

No solo eso, hay que tener en cuenta también que las reglas por las que se regía el puzzle las di por claras y más que claras cuando me planteé si había cambiado mi forma de pensar y quizás las aprendí también jugando. Desde luego, las reglas de este juego eran en gran medida desconocidas para mí y solamente la interacción podían desvelarlas. Así que me temo que no puedo sacar ninguna conclusión, al menos de este episodio.

Un saludo, Domingo.
P.D. Mi récord actual son casi 70.000 puntos, creo que tenía un 4096 y un 2048 aunque no lo recuerdo muy bien :-).

sábado, 5 de abril de 2014

A pagar otra vez

No sé si lo he comentado antes pero tengo la sensación de que mi percepción del transcurso del tiempo parece haberse acelerado en los últimos tiempos. Hace años que el tiempo no pasa sino que vuela. También es cierto que ahora se echa la vista atrás y se ven más años después de entrar en la universidad que antes de entrar en ella y ya no separan tantos los años de después de acabar la universidad de los de antes de hacerlo. A eso le podemos sumar los 14 años desde que empecé a trabajar (se cumplieron hará unas tres semanas) y los 10 años que se cumplirán en breve del viaje a Chicago.

Sin embargo, esto no es nada nuevo y no creo que tenga que ver con lo que comentaba al principio. Imagino que es simplemente una fase más ... y que lleguen muchas. En este caso hay un dato que quizás sí es diferente. Lo que ocurre es que los jueves, cuando voy a jugar al fútbol, me doy cuenta de que ya ha pasado otra semana y de hace justo una semana que pensaba lo mismo.

De hecho, hace dos semanas lo comentaba con otro de los jugadores, unos años mayor que yo y me decía lo mismo. Imagino que en su caso las responsabilidades y los hijos incluyendo una hija que creo que ya está en la universidad, harán todavía que esta percepción sea mayor. El caso es que me hablaba en esa ocasión de otro compañero de trabajo suyo que tenía la costumbre de comentar siempre a fin de mes ...

"Otra vez fin de mes y el último final de mes parece que fuera ayer. Y encima otra vez nos van a pagar. Yo no sé estos (sus empleadores) en qué están pensando)"

Pues eso, a cobrar ... a cobrar otro mes. O si lo pasamos a su versión anual: otro año, otro año a hacer la declaración y parece que fuera ayer cuando la hicimos la última vez. Y otra vez, otra vez a pagar. Yo no sé estos (los de Hacienda) en qué estarán pensando.

Un saludo, Domingo.

sábado, 29 de marzo de 2014

2004-2014 10 años - Reagan Vs Suárez

En junio de 2004 murió Ronald Reagan. No recuerdo mucho así que solamente trataré de esbozarlo. Recuerdo haber visto por la tele los funerales de estado. No recuerdo mucha controversia por allí aunque imagino que la habría porque vendría a ser lo que Aznar para los socialistas o Zapatero para los del partido popular.

Recuerdo también los comentarios de la prensa española con elogios y lo contrario dependiendo de la cuerda. Nada nuevo bajo el sol. Para los suyos, junto a Margaret Thatcher y Juan Carlos II, los grandes artífices de la caída de la potencia rusa que ahora Putin quiere revivir. Para los otros, el presidente que casi causa una o dos guerras nucleares.

Todo lo contrario ha pasado aquí con Suárez. La prensa deshecha en elogios hacia él. Los antiguos y nuevos políticos igual. Algunos de ellos posiblemente estarían entre los que, por unos u otros motivos, querían moverle la silla hasta que él mismo decidió dejarla. Yo no sé qué hubiera votado hace 30 años de haber tenido algunos más de los que pocos que ya tenía. Imagino que, como todos, hubiera dudado entre votar al partido de centro moribundo o al de izquierdas. No sé si probable pero seguro que posible que hubiera votado a González.

No en vano, en la situación actual digo que durante unos años seguiré votando a UPyD hasta que se me olvide lo malos que son PP y PSOE o hasta que UPyD tenga algo de poder y demuestre que son igual de malos.

Bueno, por ahora voy a dejarlo aquí. Tengo todavía pendientes algunos podcasts sobre Suárez así que quién sabe si habrá segunda parte de esta mini entrada.

Un saludo, Domingo.

2004-2014 10 años - 11M

Ya comenté en febrero que tocaría y solo unas semanas después me olvidé. Ha sido hoy cuando iba a escribir sobre otra cosa que he recordado que también se habían cumplido los 10 años de este terrible acto. El caso es que he durante estas semanas, por supuesto, no he dejado de escuchar remembranzas de esta fecha pero por alguna causa ya no tengo tan interiorizado ese mecanismo que me hacía apuntarme mentalmente que debía escribir de ello en el blog. Las cosas cambian. Una tontería, por ejemplo, en 2004 no tenía blog.

Otra que no es una tontería, no recuerdo cómo me enteré. No recuerdo si fue en la radio camino del trabajo pero creo que sí. O quizás alguien me lo comentó, no sé. El caso es que iba abriendo las páginas de los diferentes periódicos para comprobar las informaciones que se iban dando. Que si había sido ETA, que si solo unos meses antes habían detenido la famosa "caravana de la muerte" con 500 kilos de explosivos, que era extraño que no lo hubiera reivindicado pero no insólito pues había ocurrido en el pasado, todo el mundo dando por hecho que había sido ETA. Recuerdo por ejemplo un compañero que me dijo que iba a cambiar la dirección de su voto por este motivo. Yo defendía que, fuera cual fuera, no había que cambiar la dirección del voto.

Él después negaba haber comentado eso o, mejor dicho, no lo recordaba. Así habrá muchas personas, conmigo el primero, cuya memoria se parezca a lo que realmente pasó como un huevo a una castaña. Eso es una buena excusa para tener un blog, la verdad.

Al día siguiente participé en la primera y única manifestación en la que he participado y, aunque me incomodó ver gente que la tomaba como excusa para hablar de otras cosas, la guerra de Iraq, por ejemplo, tampoco le di mayor importancia. Se empezaba a hablar de la pista islamista. No Al Qaeda sino algún grupúsculo que aprovechaba para reivindicar todo lo que no hacía. La gente dice que desde el primer día se sabía que eran islamistas, yo no lo recuerdo así, lo recuerdo mucho más gradual, la verdad.

El sábado 13, si no recuerdo mal, se produjeron las detenciones de aquel locutorio de móviles y entonces sí que parecía claro que ya no era ETA. Se produjo también la ruptura del día de reflexión, las manifestaciones contra el PP y yo mismo recibí un SMS de una persona, militante socialista, diciendo que la BBC había confirmado que era Al Qaeda o algo así. Entré en la página de la BBC, la CNN, etc y ni rastro de dicha noticia. Sin duda habrá miles de personas que recordarán eso como algo que sí pasó. Como lo de la nocilla y Ricky Martin.

Vuelvo a repetir, mi memoria merece la misma confianza que las de esas personas, la mía también puede estar basada en cosas que no eran ciertas o incluso haber borrado cosas que sí lo eran. Lo importante no es lo que diga cada uno sino simplemente que seamos conscientes de que no debemos confiar en nuestra memoria.

El domingo voté y el lunes, probablemente el lunes, intentaba tranquilizar a un compañero con algo así como: "Tranquilo, que España no se va a acabar por 4 años de gobierno de Zapatero". A este mismo compañero, cuatro años después le dije: "Ya te dije que España no se acabaría por los 4 años de gobierno de Zapatero, eso sí, como gobierne otros 4 más no lo tengo tan claro". He tenido mal ojo en muchas circunstancias, pero posiblemente no en esta.

Mes y pico después iría a EEUU y me alegraría de estar alejado de la política española, la retirada de las tropas, las peleas acerca de si ETA había colaborado o no ... y unos meses después viviría desde allí los funerales por Reagan. Pero eso es materia de otra entrada.

Un saludo, Domingo.

sábado, 22 de marzo de 2014

Arte

Arte, hay que tener arte. Lo de tener arte es una expresión muy andaluza y me encuentro un tanto reacio a utilizarla porque me parece que debe haber alguna otra expresión más neutra que exprese mejor lo que quiero decir, esa mezcla de genio, ingenio y hasta guasa con la que algunas personas han sido bendecidas. Y digo que debe haber alguna otra expresión porque ese "arte" no es exclusivo de los andaluces.

Por ejemplo, hace años, cuando evidentemente era algo más joven, me reenviaron una canción del Chivi, "el pornoautor". La canción, no apta para oídos sensibles, es "La jota de la perra parda" :


Un ejemplo más modoso, que quizás nos recuerde a esas otras actuaciones de letras tan picantonas como las cabareteras que las realizaban, es el de Otxoa al que he conocido hoy en un podcast donde han hablado de él. Por lo visto este hombre es toda una institución en el País Vasco y "La ventaja de la raja" es una de sus canciones más populares:

Por último y volviendo a conceptos más tradicionales de "arte", no es necesario comentar lo que me gustan los versos, tanto los reversos como los perversos y diría que en particular estos últimos. Barbeito demostraba antes en sus poesías y ahora en sus rimas todo lo que ha leído y lo muchísimo que recuerda de ello. Conozco a más personas que son así. A mí, ya me gustaría.

Unos de los últimos perversos de Barbeito es sobre Europa. Pues bien, ahí, en un momento hilvana toda una sucesión de referencias político-europeas con palabras de la siguiente lista. En concreto, si quito aquellas palabras con las cuales resulta casi imposible rimar, me queda una lista muy parecida a la suya aunque no exactamente la misma. Con esa lista intentaré divertirme como hacía antes con el soneto aleatorio. Evidentemente no será lo mismo que el de Barbeito pero tampoco lo pretendo.

Entra a oscuras, ilumina la luna, mira la cuna, la besa y la arropa, 
En el salón y seguidos, dos partidos, uno de liga y otro de copa,
En la radio, entrevista al estadio y uno responde que el otro se dopa,
Mientras de fondo, acompañando al rondo, toma ventaja la raja de Estopa 

Dos partidos en tres días, por ello se discutía si caerían en Europa 
Salta la alarma, el galgo de Parma, a todo trapo galopa
Por supuesto, no ha visto en su vida nadie más puesto, ni de farlopa
Vale el gol, ¡Pita el final!, tras tanto nadar, la ropa al guardarropa 

La empresa casi lista, los de la entrevista ya casi presentan la OPA
Ese galgo, ni corto ni largo, vuelve a bordarlo por proa y por popa
Corre como Gento, manda como un sargento y dispara a quemarropa
Así mientras otros, futbolistas del tedio, se quitan de en medio y se tientan la ropa
Otros como el de Parma, sacan el arma y el gol saldrá hasta en la sopa
En días como estos, contra el fútbol uno se cruza y se topa ...

Y dirás como Romanones: !!!Vaya tropa, vaya tropa, vaya tropa¡¡¡

Conclusión, el arte hay que tenerlo y unos tienen más que otros. A mí probablemente me falta más que me sobra pero, sin embargo, no me importa. Yo, con pasar un buen raro, me conformo. Vamos, como el fútbol y ese partidito de un par de horas de esta mañana.

Un saludo, Domingo.


sábado, 15 de marzo de 2014

Lectura para aburrir

Cierto es que leo menos de lo que debiera pero también es cierto que me fuerzo a mí mismo a leer. En cualquier caso, hace años me propuse una serie de retos personales con la lectura como excusa. Mi intención era leer siempre que pudiera en el idioma original y en particular poder leer los grandes clásicos. Entre ellos había pensado


  • The Lord of the Rings: el gran clásico de la literatura inglesa contemporánea. Decían en el ejemplar que compré que el mundo angloparlante se encontraba dividido entre aquellos que lo habían leído y los que decían que lo iban a leer. 
  • Don Quijote: el gran clásico español, la obra maestra inauguradora de la novela moderna.
  • Don Quixote: y su traducción al inglés.
  • Don Quixote: y su traducción al francés
  • Ulysses (James Joyce): Decían que era una obra maestra y también muy difícil de leer. No se equivocaban, al menos en lo segundo :-).
  • Les Misérables: uno de las grandes lecturas de mi infancia y también uno de los grandes clásicos franceses.

Y también entre ellos se han ido colando otras que no son clásicos y no sabemos si algún día lo serán:
  • The pillars of the earth
  • A world without an end
  • Les piliers de la terre
  • Los de Dan Brown ...
  • Los de Harry Potter ...
La verdad es que, años después, me alegro de haber llegado hasta aquí. Siguiendo un símil alpinista, si tuviera 14 ocho miles de literatura, habría subido ya 12 y me quedarían dos, posiblemente los más complejos:
  • Las Obras completas de Shakespeare. 
  • El Fausto de Goethe.
Para el primero, empezado esta semana, solo necesitaré tiempo, bastante tiempo. Según Kindle, tras una semana leyendo todavía no he superado el 1%. Con esa progresión y teniendo en cuenta que una gran parte del final estará dedicada a vocabulario, una estimación realista podría estar entre el año y año y medio. Hasta ahora los que más tiempo me han llevado han necesitado unos 5-6 meses. Claro que estas son las obras completas ...

Para el segundo necesitaré bastante más. Por lo pronto aprender alemán, lo cual no parece que vaya a ocurrir en breve e incluso es posible que nunca ocurra. El tiempo lo dirá.

Un saludo, Domingo.

sábado, 8 de marzo de 2014

Tergiverso maldito

Escuché el otro día en la radio que había muerto un poeta. Por lo poco que comentaban su salud mental estaba tan deteriorada como buenas eran las cosas que escribía. Por lo poco que escuché, su caso debía ser parecido a ese genial guitarrista que murió el año pasado y del que, sobre todo, comentaban su habilidad para tocar una guitarra huérfana de tres cuerdas en un estado mental que distaba mucho de ser el mejor para ello. Basta con ver el vídeo para saber que yo, que nunca he tocado una guitarra, ni con 40 años de entrenamiento podría tocar como él. Si así tocaba un borracho demente, cómo no lo haría pleno de facultades.

Alentado por esta comparación, he buscado también algún vídeo del poeta en cuestión y he encontrado esta entrevista a Leopoldo María Panero en la que se puede apreciar también eso que había escuchado varias veces en los veintipocos y que solamente he podido contrastar en los treintaymuchos: solo una fina línea separa al genio del loco. Esta maldición que afecta a tantas personas que lo tenían todo para triunfar y se suicidan jóvenes y depresivos o mueren viejos y locos espero que me inspire algún tergiverso maldito. Allá vamos:

En la vida hay campos sembrados de minas,
En los que solo se atreven los mejores,
De ellos se cantan proezas y se cuentan amores,
Gente que vuela, ni corre, ni anda ni camina.

Doblan acero sin esfuerzo, como doblan esquinas,
Ejecuciones perfectas, sin dudas, sin temores,
Más aparece el levante, se les notan temblores,
Creyendo volar, no lo hacen y pisan la mina.

Algunos perecen, son jóvenes leyendas,
Otros, menos afortunados, siguen con vida,
Pobre diablo, lo que pudo haber sido,
Una mente demente, harapos y vendas,
Un cuerpo recuerda la fuerza perdida,
Una víctima, un genio, un niño dormido.