sábado, 27 de diciembre de 2014

Electrizante final de año

La verdad es que el final de este año que se acaba en unos días está siendo un visto y no visto. Desde septiembre hasta ahora, desde que murió mi abuela casi podría decir, muchas cosas han pasado en muchos aspectos de mi vida y creo que pocas he contado aquí. Por ese motivo, aquí va un pequeño resumen que podría incluso valer como resumen del año.

Septiembre, octubre y noviembre fueron los meses de la compra de casa, compra de casa que se firmó ya empezado diciembre. Desde entonces días de limpieza y arreglos de una casa con potencia ... y mucho trabajo por delante.

Y entre medias, un despertar futbolístico de esos que pasan muy de vez en cuando solo que esta vez fue especial. Esta vez debí marcar como diez goles en un partido de diferente factura. Y al partido siguiente más o menos por el estilo. Y entonces se fue la magia, tal como pasaba en la película de Robin Williams. De vez en cuando se produce algún chispazo como el de hoy, último partido del año que he empezado con un zapatazo a la mismísima escuadra que me hizo ilusionarme con otro de esos días de inspiración de cara al gol pero que finalmente no resultó ser sino el recuerdo de lo que fue y posiblemente nunca ya más sea; mi particular canto del cisne.

De hecho, si tengo resumir estos cuatro últimos meses posiblemente lo haría como una racha de suerte sin parangón; simplemente eso. Esa racha de suerte ha podido incluir cosas como una casa con capacidad para albergar más perros que personas, una bonita colección de goles y por último un "torneo de suerte". Ese torneo de suerte no es ni más ni menos que una competición en el trabajo para ver quién ganaba más fichas en un casino. Y resulté ser yo. Aunque eso merece una entrada aparte. Una entrada que escribiré después y publicaré antes así que tampoco voy a extenderme mucho más.Y por el momento me despediré con unos versillos de final de año tal como he estado haciendo durante los últimos ... los que sea.

Tresciento sesenta y cinco días
En que la vida pasa con y sin daño,
En algunos se te va la alegría,
En otros la alegría te la lía,
Y en el último, la esperanza: un nuevo año.


Feliz Año, Domingo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario